El cuerpo del multimillonario egipcio Ashraf Marwan fue encontrado, el miércoles 27 de junio de 2007, delante de su domicilio londinense. Según los primeros informes, parece que Ashraf Marwan se cayó del balcón de su apartamento, en un cuarto piso. Scotland Yard no se decide a calificar su muerte de accidente ya que el difunto había dicho a sus allegados que temía por su vida.

Ashraf Marwan había estado al servicio del presidente Gamal Abdel Nasser, y se casó con su hija Muna. Convertido en consejero del presidente Anwar El-Sadat para asuntos árabes, Marwan fue reclutado en 1971 por el jefe de la estación CIA en el Medio Oriente, Thomas Twetten. Basándose en informaciones estadounidenses, frustró un complot prosoviético, real o supuesto, contra el presidente Sadat. Dio orden de arrestar a los presuntos jefes de la operación –Sami Sharad (jefe de los servicios secretos egipcios) y Ali Sabry (vicepresidente)– y se convirtió en el hombre fuerte del Cairo. También desempeñó un papel central en el subsiguiente cambio de Egipto hacia el bando «occidental».

En 1975, Ashraf Marwan se convirtió en presidente de la Organización Árabe de Industrialización y en prospero empresario. Poseía acciones en empresas como Ubichem London, House of Fraser, American International Petroleum, Chelsea Plc, British Home Store y Habitat.

Sin embargo, en 2002, en un artículo de Yediot Achronot, y más tarde en su libro A History of Israel, el historiador británico Ahron Bregman identificó a Ashraf Marwan como «La Fuente», que bajo el sobrenombre de «Babel» intoxicó al Mossad sobre el desencadenamiento de la guerra israelo-egipcia de octubre de 1973. Según Bregman, Marwan se presentó espontáneamente, en 1969, en la embajada de Israel en Londres, convirtiéndose en espía. Actuando como tal, proporcionó información fiable durante años, ganándose así la confianza de los israelíes. Pero, al parecer los engañó sobre lo más importante, haciéndoles creer que Sadat no pensaba tratar de liberar los territorios egipcios hasta que no tuviese misiles de largo alcance a su disposición.

Considerado un héroe en su propio país, durante los últimos años Ashraf Marwan se había convertido en uno de los principales vendedores de armamento del Medio Oriente. Trabajaba, entre otros, con Adnan Khashoggi, así como con Mohammed y Doddi Al-Fayyed.