El congresista Edgar Villanueva ha tenido una idea (si así podemos llamar al mamarracho) peregrina: propuso que Diego García Sayán sea el primer ministro de lo que llaman consenso. Es obvio que este parlamentario ha entrado en la antología de la frivolidad y en la tumba del olvido. Niño Diego no es independiente y ¿tan mal estamos que siempre discurrimos por los mismos discos rayados aunque sean fatuos, vivazos y partícipes de la gran estafa que ha hecho la izquierda caviar en el Perú?

¿No sabe Edgar Villanueva que cuando masacraban en Chile a Aerocontinente, Niño Diego premió a su par la canciller de ese país sureño en Lima? Hay sinverguenzas que no tienen siquiera una pizca de dignidad y amor por el país y sus héroes.

¿Desconoce Edgar Villanueva que Niño Diego, cuando ministro de Justicia, mintió al país cuando dijo que no sabía de las charlas de café con los terroristas en que estaba involucrado uno de sus funcionarios en los penales?

¿Tampoco tiene conocimiento Edgar Villanueva que la ONG particular de Niño Diego, la Comisión Andina de Juristas, hacía negocios muy buenos con la dictadura delincuencial de Fujimori, a través de contratos para reformar el Poder Judicial?

¿Qué tiene Niño Diego de independiente? ¿Cuál es el prestigio de este Adonis de juguete? A menos que Edgar Villanueva no conozca, como tampoco lo saben millones de peruanos, que Niño Diego se mandó hacer un libro y que en él colocó más de 300 fotografías de su recorrido por la Cancillería.

Niño Diego pertenece a esa promoción de falsos profetas sociales que ha hecho de las ONGs unas enormes factorías productoras de dólares con el discurso en nombre de los pobres que son los eternos justificativos para sus múltiples folletos, talleres, foros, agendas, etc., etc., y etc.

Sería muy interesante que Niño Diego le explicara al país cómo así que nombró a ciertos cónsules honorarios que pertenecían a entornos determinados y con claras trabazones en negocios millonarios de armas en Europa.

¿No fue Niño Diego quien, siendo canciller, nombró a su socio en Cepes, Mariano Valderrama, como titular en la agencia de cooperación externa, para favorecer a los amigotes y a los amigos de sus amigos?

¿No es acaso hoy por hoy, el jefe del grupo a la sombra que direcciona todos los fondos de la ayuda externa al Poder Judicial y que podría nombrarse a cualquiera en Justicia, sin que eso afectara este feudo de Niño Diego?

¡Definitivamente, Edgar Villanueva, ha comenzado su biografía por la última página. Creo que será célebre por bobo e incauto.

Ataquemos al poder; el gobierno lo tiene cualquiera.

Hay que romper el pacto infame y tácito de hablar a media voz.

Herbert Mujica Rojas