Seis marchas de la oposición que convergerán hacia el llamado Distribuidor Altamira, en las zonas de clase media-alta del este caraqueño, bastión de la oposición, y una concentración oficialista frente al mismo palacio de gobierno, cierran este jueves las campañas en la capital. Muchas empresas han dado a sus trabajadores medio día libre o han cerrado para permitir (alentar) a la gente participar en las manifestaciones.

Será la marcha "más importante que haya realizado la oposición venezolana, será espectacular y llenaremos la autopista Francisco Fajardo porque la avenida Bolívar (centro) nos queda pequeña", dijo a la prensa internacional el dirigente opositor Jesús Torrealba, al aludir monumental marcha oficialista de centenares de miles del personas, el domingo pasado.

En la "Avalancha del futuro", como llaman a su movilización, los opositores prometen mitines políticos, espectáculos de fuegos artificiales, música y algunas "sorpresas". La tesis opositora señala al gobierno de crear un "clima de tensión artificial" a cuatro días de la consulta, para generar temor en la población y favorecer la abstención, porque "le teme al voto de los venezolanos", insistió Torrealba.

En tanto, el oficialismo también anunció para hoy la organización de varios actos callejeros, que se iniciarán a primera hora con un "mercado campesino" en el centro de Caracas.

Los dirigentes de ambas partes instan a sus partidarios a votar masivamente. Entre viernes y sábado no deberá haber ningún tipo de propaganda o actividad proselitista en los medios de comunicación.
El clima es de calma cívica, con “demasiados pocos” actos de enfrentamiento y/o violencia, al decir de un observador español. Y sí, también hay tensión. A tres días del referendo en el que 14 millones de venezolanos podrán votar para decidir si quieren o no revocar el mandato del presidente Hugo Chávez, en las avenidas caraqueñas los carteles y graffitis disputan paredes, postes de alumbrado y puentes.
Los cerros que rodean el amplio valle caraqueño, bastión popular y del oficialismo, están llenos de banderas rojas con la consigna "No volverán". En un paredón una leyenda advierte: "Yanquis, aquí manda el pueblo y Chávez."

Guardias armados y alambrados de púas “protegen” a la clase media-alta del este y sureste de la ciudad, donde predominan carteles por el "Sí" (a revocar el mandato presidencial), que conviven con avisos de whisky y de tratamientos contra la celulitis.

Los vendedores ambulantes tienen su corazoncito, pero deben aprovechar la oportunidad, ofreciendo banderas, cachuchas (gorras) y stickers para automóviles, con consignas oficialistas y también opositoras (bussines is bussines).

El jefe de la misión de la OEA, el brasileño Valter Pecly Moreira, dijo el miércoles, tras reunirse con las autoridades electorales, que estaba "satisfecho con lo que ha pasado hasta ahora." El secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, pidió por su parte una supervisión "efectiva y sin restricciones" del referendo.

El Presidente del CNE, Francisco Carrasquero, aseguró que el simulacro con las máquinas captahuellas "fue fenomenal". Jorge Rodríguez, otro de los directivos, informó que se terminó de ensamblar el material electoral de las mesas automatizadas y manuales, y se comenzó a distribuir a los estados más distantes.

Para revocar el mandato del gobernante venezolano se requieren unos 3,8 millones de votos, que el mandatario no obtenga más votos que la oposición, y que además acuda a votar al menos 25% de 14 millones de electores.

Cura, rabino y pastor

Este miércoles los representantes de las tres principales iglesias que existen en Venezuela -Baltazar Porras, presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, el rabino Pynchas Brener, y el pastor evangélico, Samuel Olson- hicieron un inusual llamado conjunto a la paz y a la participación.

Inusual porque los máximos referentes de la iglesia católica participaron -con el hoy fallecido cardenal Ignacio Velazco a la cabeza-en el golpe de Estado del 11 de abril de 2002 contra el presidente Chávez.

"La construcción del futuro del país depende grandemente del referendo, a todos los ciudadanos les exhortamos a cumplir con su deber, a no inhibirse, sino votar en conciencia, sin temores, sin coacciones ", dijo Porras.

Mientras, Pynchas Brenner advirtió que "lo peor que nos puede suceder es el conflicto y la agresión, eso solo conduce al odio, a la enemistad, a la destrucción y lo que nosotros necesitamos es construir".

Repercusión internacional

El miércoles, un analista del Centro Woodrow para América Latina, develó el giro de timón que el gobierno de George Bush se vería obligado a dar de mantenerse Chávez en el poder. El experto reconoció la gravedad de una situación inestable en el quinto exportador y octavo productor mundial de crudo. EE UU tiene suficiente con Irak para arriesgar a un proveedor confiable. Más aún, según la Cepal, Venezuela liderará el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) con 12% a fin de año.

"El mercado está convencido de que si el presidente Chávez gana, las compañías petroleras extranjeras se animarán a regresar al país para invertir", explicó el miércoles, David Thomas, analista en la Commerzbank.

La urgencia de pasar esta página y que la pugna política disminuya encuentra eco en los mercados internacionales. "Para la industria petrolera, lo peor sería un resultado que conserve la incertidumbre", considera Julian Lee, analista en el Center for Global Energy Studies.
Papa pide "serenidad y reconciliación."

El Papa Juan Pablo II invocó ayer para Venezuela "un clima sereno de paz y reconciliación" con ocasión del referendo. El pedido del Papa fue hecho al término de la tradicional audiencia general de los miércoles celebrada en la residencia veraniega de Castelgandolfo, a unos 30 kilómetros de Roma.

"Recuerdo hoy particularmente a Venezuela, pidiendo al Señor que bendiga e ilumine a todos sus ciudadanos concediéndoles un futuro abierto al progreso y la esperanza", afirmó el Papa.

La oposición ha construido a Chávez en lugar de destruirle, señala el diario Panorama. El diario Panorama, el de mayor venta en el país pese a editarse en la ciudad de Maracaibo, señaló este jueves en un análisis editorial, que "casi todos los resultados verosimiles del referendo son buenos para el presidente Chávez”. El texto del análisis es el siguiente:

“Lo que parece descartado -una derrota por gran margen- será verdaderamente ruinoso para su carrera política. Si gana el «NO», aunque sea por breve margen, el Mandatario queda gloriosamente ratificado, y en la mejor posición para revalidar victoria electoral cuando corresponda; y si pierde, también por una diferencia pequeña de sufragios -como se supone que es el peor resultado que pueda obtener- sigue encontrándose en condiciones de presentarse en su día a las próximas presidenciales con excelentes posibilidades de victoria, como víctima de un complot de la oligarquía.

La oposición, en buena parte de dudosas credenciales democráticas, es la que ha construido a Chávez como una figura política de dimensión latinoamericana, en lugar de destruirle.

Tras el referendum, parece más que probable que el presidente venezolano esté más fuerte que antes. No hay como confundir farsa con drama para crear demonios y enemigos inexistentes. Chávez era mucho más seducible que derrocable. Y esto último lo esta ya en la mano de Washington. La operación revocatoria, aunque perfectamente legal, no ha sido positiva para la democracia en la zona. A Chávez ha de haberle dejado cumplir su periodo sin mayores aspavientos y, si tan malo lo hace, que no se le vote nunca más a la presidencia".