Cuando en agosto 2002 la hoja de coca hizo su irrupción en el Congreso boliviano, nadie se imaginó que dos años después también lo haría en el Parlamento Europeo. Así ocurrió los días 14 y 15 de diciembre, cuando un grupo de activistas defensores de la hoja de coca, montaron un stand en la sede de Strasbourg desde el cual ofrecieron mate de coca a los eurodiputados, para demostrar que esta planta no sólo no es dañina sino que tiene un alto valor medicinal y nutritivo. Bolsas de mate de coca, pomadas para diversos usos realizada a base de coca, así como material informativo diverso fue expuesto en dicho stand organizado por ENCOD(European Coalition for Just and Effective Drug Policies) y el Consejo Andino de Productores de Coca.

Esta acción de información y sensibilización tuvo por objetivo lograr apoyo entre los diputados para la aprobación de la Propuesta de Recomendación destinada al Consejo sobre el Proyecto de Estrategia Antidroga de la UE (2005-2012), presentada por el diputado Giusto Catania. El objetivo fue alcanzado exitosamente, ya que dicha propuesta ha sido finalmente aprobada por un justo margen -285 votos a favor, 273 en contra y 23 abstenciones- y será presentado en la próxima cumbre del Consejo (17 de diciembre) donde se firmará la nueva estrategia contra la droga en la UE.

Entre las recomendaciones que se presentarán al Consejo está la de fomentar la aplicacion medicinal y nutricional de cultivos tradicionales como la coca, el opio y el canabis. Estos cultivos, como se sabe, son considerados ilicitos por la ONU, situacion que genera diversos tipos de violencia en los paises que los producen.

Coca no es cocaína

Durante la campaña de sensibilización, el diputado boliviano Dionicio Núñez, representante de los cultivadores de la hoja de coca de Bolivia, tuvo la ocasión de conversar con diversos parlamentarios ante quienes expuso la necesidad de despenalizar la hoja de coca y acabar con esa injusta asociación que se hace de los cultivadores de coca con la violencia, el narcotráfico y otros crímenes. «La coca no es cocaína y nosotros somos campesinos, no narcoterroristas -señaló el diputado- . Cultivamos una hoja que para nosotros no solamente es una tradición cultural, sino que es una medicina y un alimento de uso generalizado y que está al alcance de todos».

Campesina india vendiendo hojas de coca en la calle
Foto Ch’amak Pacha Proyecto Arqueológico

Pese a que diversos estudios e informes científicos (incluído uno de las Naciones Unidas) han demostrado ampliamente que la hoja de coca no es dañina a la salud y que por el contrario es un alimento extraordinario, sigue pesando sobre ella una penalización internacional que impide su exportación.

Para Núñez, legalizar la hoja de coca y permitir su exportación sería una verdadera política de desarrollo alternativo, porque de esa forma todo la coca excedentaria podría ser destinada a la elaboración de medicinas, infusiones y diversos productos alimenticios que serían de gran interés en Europa, creando así un mercado que podría rendir grandes beneficios a las poblaciones que cultivan coca, beneficios no solamente económicos, porque de ese modo también se acabaría con la leyenda negra que pesa sobre los campesinos cocaleros.

Núñez encontró ecos favorables sobre todo entre diputados verdes y de la izquierda europea, quienes expresaron su solidaridad con la causa cocalera.

Entre ellos, el presidente de la delegacion del Parlamento Europeo para la Region Andina y diputado por los verdes, Alain Lipietz, quien se refirió a la importancia de que Europa haga un cambio en su política sobre cultivos tradicionales considerados ilicitos, como la hoja de coca, para frenar la represion que esta produce no sólo contra las personas, sino contra el medio ambiente, afectado por la violencia con que se combate los cutivos. El fumigado, la forma cómo se procede a arrancar las plantas y la misma presencia militar masiva significan, para Lipietz, una agresión al medio ambiente.

Lipietz adelantó a Núñez estar dispuesto a iniciar conversaciones oficiales entre el Parlamento Europeo y el Parlamento Latinoamericano, que se reunirán en Lima en mayo de 2005, a fines de avanzar el proceso legislativo hacia la despenalización de la comercialización de productos derivados de la hoja de coca en Europa. Finalmente, en un acto de adhesión a la campaña y haciendo eco del slogan «coca no es cocaína», el eurodiputado bebió una taza del tradicional mate de coca.

Informe Catania

El informe presentado por Giusto Catania propone un cambio fundamental del curso en la política europea de drogas, afirmando entre otros que:

 La estrategia de drogas de la UE ha sido un fracaso (es una conclusión política de las estadísticas que todos conocen pero que hasta ahora han sido ignoradas por las autoridades)

 La reducción de daño y perjuicios debe ser el elemento clave de las políticas de drogas (se establece la reducción de daño como base y no como suplemento de la política de drogas)

 Se debe apoyar a la investigación del uso benéfico de canabis, coca y opio (es el comienzo del fin de la prohibición de estas tres plantas, ya que existen estudios de sobra que demuestran sus valores positivos)

 Se necesita una involucración más concreta de la sociedad civil (significa una derrota para los gobiernos e instituciones europeas que han negado sistemáticamente la participación de la sociedad civil en el proceso de decisiones políticas)

Su aprobación ha significado una importante victoria para la ENCOD, institución que ha venido realizando distintas campañas desde hace cuatro meses. Según sus representantes, ahora hay que esperar que el Consejo Europeo de Ministros tome en cuenta las recomendaciones del informe Catania cuando adopte esta estrategia el día 17 de diciembre. "Es muy probable que no lo hagan, pero la aprobación del informe significa que el Parlamento Europeo ahora puede presionar a la Comisión Europea, el órgano ejecutivo de la UE, de aplicar las recomendaciones en la aplicación concreta de la estrategia" señalan.

ENCOD ha propuesto a la Comisión de organizar una conferencia en la primera mitad de 2005, donde el curso de la política de drogas de la UE debe ser discutida con participación significativa de la sociedad civil.

Finalmente afirmaron que, «el informe Catania manda un mensaje muy claro a las autoridades y los ciudadanos europeos. Europa está lista para un cambio en su enfoque al fenómeno global de drogas. Se puede resolver un dilema político. Por primera vez en la historia, un parlamento de tan alta reputación como el PE ha expresado la necesidad de terminar el pensamiento convencional sobre las drogas. Estamos cerca a la primera decisión mayor para terminar la guerra a las drogas».

El documento completo de la Propuesta de Recomendación destinada al Consejo sobre el Proyecto de Estrategia Antidroga de la UE (2005-2012) puede ser consultado en la página web del Parlamento Europeo.