Este diario y muchos de sus lectores han tenido grandes desacuerdos conmigo en relación con Irak. La controversia tendrá probablemente gran influencia en la decisión que adoptarán algunas personas durante las elecciones del jueves. Me doy cuenta de que muchos piensan que la acción militar en Irak era errónea, pero no pediré disculpas pues creo que siempre tuve razón al tomar esa decisión. Pensé, y sigo pensando, que participar en esta guerra era la mejor solución para Gran Bretaña, la región y el mundo. Teniendo en cuenta sus reiteradas violaciones de las resoluciones de la ONU, yo tenía la opción de derrocar a Sadam Husein o de mantenerlo en el poder. Escogí derrocarlo y luego de una semana de ataque de los conservadores con relación al tema, Michael Howard admitió que habría hecho lo mismo.
Charles Kennedy declaró que habría seleccionado la otra opción, lo que solo habría fortalecido a Sadam Husein y debilitado a la comunidad internacional. Ahora seguiría en el poder en Bagdad. Sin embargo, independientemente de lo que diga Charles Kennedy, estas elecciones no tienen que ver solo con la guerra. La gran interrogante es: ¿qué gobierno queremos? ¿Qué política elegiremos para nuestras vidas? Los conservadores no tienen proyectos, pero tratan de ocultarlo con sus ataques. Esperan ganar el poder convenciendo a los electores laboristas de abstenerse o de votar por los liberales. Es una tentación tal vez compartida por lectores de este diario. Los sondeos no cuentan ya que basta con que uno de cada diez electores laboristas siga este movimiento para que tengamos un gobierno conservador. Votar por los liberales es votar a favor de un gobierno conservador.
Sé que muchos de los lectores no quieren un gobierno Howard.

Fuente
The Independent (Reino Unido)

« This election is about more than the war - or me », por Tony Blair, The Independent, 3 de mayo de 2005.