La coalición anglosajona ha desmentido siempre a sus detractores que la acusan de haber invadido Irak para controlar sus riquezas petroleras. Durante estos últimos meses se ha esforzado en justificar a posteriori su intervención en nombre de la «democratización» mediante la organización de un simulacro de elecciones. Sin embargo, considerando que el mundo se ha resignado al hecho consumado, la coalición ya ni siquiera se toma el trabajo de enmascarar sus intenciones. Así, su agente Ahmed Chalabi (de negro en la foto), el mismo que inventó las armas de destrucción masiva para «vender» la aventura militar a la opinión pública, acaba de ser nombrado... ministro del Petróleo.