«Una propuesta provocadora»

El embajador de Estados Unidos ante la ONU, John Bolton, quien fue impuesto por George W. Bush, es un gran provocador. De esta forma, pocos días después de su nominación para la ONU, Bolton comenzó a aplicar sus propuestas. Se trata ante todo de pedir a la ONU que realice reformas internas con relación a 750 temas. De la misma forma, dicho embajador declaró durante un encuentro con dirigentes judíos hace dos días que acudirá a cualquier medio que le permita defender a Israel en la Organización de las Naciones Unidas.
Para justificar su lucha contra la ONU dice que es hora de poner fin al reglamento actual y a las limitaciones del derecho al veto en el seno del Consejo de Seguridad. También acusó a la ONU de oponerse al país hebreo. El embajador estadounidense declaró públicamente que la denominación de «Naciones Unidas» no existe, sólo cuenta «Estados Unidos». Al parecer, Bolton y el gobierno estadounidense quieren ofrecer la primera recompensa, y con toda seguridad no la última, al gobierno de Sharon luego de su retirada de Gaza.
Claro está, si tenemos en cuenta los conflictos en el seno de la ONU, es poco probable que los deseos de Bolton se materialicen, al menos en un futuro próximo. Pero el hecho de introducir tales propuestas es visto como una provocación por todos los miembros de la Organización de las Naciones Unidas. Además, las propuestas, o más bien las reivindicaciones del embajador estadounidense, sólo reflejan la política del gobierno de Bush. Por lo tanto, la democracia árabe debe reaccionar, antes de que sea demasiado tarde, y enfrentar tales provocaciones.
Recordemos sin embargo que Bush padre había prometido suspender la decisión de la Asamblea General que calificaba al sionismo de movimiento racista. Al menos logró mantener su promesa cuando él mismo no se creía capaz de hacerlo. A Bush hijo no le es suficiente lo que su padre ofreció al Estado hebreo. Quiere por lo tanto que se le conceda un escaño en el Consejo de Seguridad a su íntimo aliado.