Las elecciones mexicanas siguen manteniendo el suspenso para conocer el ganador pero sobre todo lo que más impresiona es la manipulación del poder en esta competición democrática.
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Recuento de actas en una de las juntas distritales del Instituto Federal Electoral en Gustavo A. Madero
Foto Francisco Olvera. La Jornada.
El candidato de la coalición Por el Bien de Todos, Andrés Manuel López Obrador, mantenía a las 2.42 de la madrugada una estrecha ventaja de 35.72 por ciento de los votos, equivalente a 14 millones 412 mil 96 sufragios, contra 35.47 del panista Felipe Calderón, es decir, 14 millones 303 mil 681, cuando ya se habían computado 96.63 por ciento de las casillas. La diferencia entre ambos era de 0.25 por ciento. Después de más de 18 horas de que se inició el cómputo, la diferencia entre ambos candidatos a la Presidencia continuaba reduciéndose -siempre con el perredista en la delantera-, en una carrera entre el porcentaje de distritos que faltaban de ser computados y la diferencia entre los dos contendientes.
Fuente: La Jornada, México 6 de julio de 2006
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