En sus décadas iniciales de vida solo era mencionado para intentar demostrar que el no alineamiento era insostenible en aquel mundo regido por dos grandes polos políticos y militares opuestos, que paradójicamente fueron los que hicieron necesaria su aparición.

Ejemplo demostrativo de ese deliberado silencio fue lo ocurrido con la cobertura de la VI Conferencia Cumbre celebrada en La Habana en septiembre de 1979. En esa ocasión fueron acreditados alrededor de mil periodistas de unos 100 países.

Casi tres décadas después está por conocerse cuál fue el destino de lo escrito por ellos, pues apenas aparecieron publicadas pequeñas notas informativas sobre el acto inaugural ¡y nada más!, a pesar de que en el capitalino Palacio de las Convenciones estaban presentes 94 Jefes de Estado y Gobierno - el 50 por ciento del total mundial - y la agenda contenía temas de la mayor importancia para la humanidad.

Quienes cubrieron aquel evento, el más relevante por aquellos días a nivel planetario, recuerdan las quejas constantes de los corresponsales norteamericanos por la no publicación de sus reportes diarios.

Ahora las contadas ocasiones en que el tema del no alineamiento ocupa espacios en la gran prensa, este se dedica a restarle importancia y vigencia como actor en la arena internacional.

Antaño lo mencionaban únicamente para negarle la necesidad de existir debido a la bipolaridad, y actualmente mantienen la misma tesis, pero por lo opuesto: la unipolaridad mundial.

En realidad se trata de un sórdido conciliábulo mediático organizado desde los grandes centros de poder imperial, con la finalidad de desconocerlo mediante una hábil combinación de silencio y eventuales críticas relacionadas con su no legitimidad como alternativa válida en la arena internacional.

Al hacerlo pretenden encubrir que es precisamente esa unipolaridad y la existencia de una superpotencia con pretensiones hegemónicas galopantes las que lo hacen imprescindible, tanto, que de no aparecer la idea de su creación en la Conferencia Afroasiática de Bandung, Indonesia, en 1955, habría aparecido en tiempos posteriores.

En la XII Cumbre realizada en Cartagena de Indias, el presidente Fidel Castro abordó el tema y fue muy claro al respecto.

En esa ocasión afirmó: " Nuestra razón de ser puede haber sufrido cambios, pero no ha dejado de existir. Nunca antes, desde la creación de nuestro Movimiento hace 35 años, fuimos tan marginados y desconocidos en la política internacional, ni tan discriminados y relegados en la ayuda para el desarrollo".

Ahora está por ver si a pesar de que en la Cumbre de La Habana se incorporarán temáticas vinculadas con la sobrevivencia de la especie, el silencio se mantendrá y solo será roto, como hasta ahora, para tratar de demostrar la no vigencia de los NOAL.

# Agencia AIN (Cuba)