El 17 de septiembres, las autoridades de la región de Transnitria organizaron otro referéndum, el séptimo desde 1991, en el que se planteó a la población de 580.000 habitantes dos preguntas : la de la independencia de Moldavia y la de la anexión a Rusia . Se trata del segundo referéndum sobre la independencia que se celebra : el primero tuvo lugar en 1991. Esta región forma parte del territorio moldavo conforme a sus fronteras reconocidas por la comunidad internacional hace 15 años. En cuanto a la segunda pregunta, decir que es un tanto complicado anexionarse a Rusia dado que no tiene frontera común [antes Moldavia era una república de la unión Soviética]. No hay frontera común pero lo que sí hay son muchas municiones en común, el ejército ruso estacionado en la región desde los tiempos de la Unión Soviética y el claro apoyo ruso a la región autoproclamada. Es ese apoyo el que impide que se llegue a una solución para el conflicto y obstaculiza la integración de Moldavia en las estructuras europeas.

Incluso si Europa ha tomado algunas medidas —bastante tímidas— en contra de los dirigentes de Transnitria (denegación de visados) y desempeña junto con Estados Unidos el papel de observador de las negociaciones para la resolución del conflicto, Bruselas no desea dañar sus relaciones con Rusia. Ahora bien, en 2007 o 2008 como muy tarde, Rumania será miembro de la Unión y con ello, será Europa quien pasará a tener frontera con Moldavia y por tanto también con el espinoso problema de Transnitria.

El partido que gobierna Moldavia se auto define como «el de los comunistas» y muchos de sus miembros son fieles adeptos a las relaciones con el «gran hermano» ruso; pero ante todo, es un partido incapaz de elegir, que se debate entre Rusia —el mayor mercado exterior para Moldavia— y Europa, que representa la esperanza de integración en Europa de una Moldavia latina con 4 millones de habitantes que quedaría situada (tras la entrada de Rumania en la UE) entre la Unión Europea y el mundo eslavo (Rusia, Ucrania, Bielorrusia). Este gobierno trata de obtener el apoyo europeo para resolver el problema pero sin embargo rara vez aparece en el radar de política extranjera de la Unión.

La comunidad internacional no reconocerá los resultados del referéndum y Rusia aún no se ha pronunciado sobre la cuestión de la reanexión; sin embargo, unas semanas antes de que aquel se celebrara, el líder separatista Igor Smirnov declaraba que « Incluso si Rusia no reconociera el resultado del referéndum, lo apoyaría». Vladimir Putin dice estar muy preocupado por la forma en que los occidentales quieren resolver el problema de Kosovo. La independencia de esa región sentarán un precedente histórico. La situación en Transnitria y Osetia del Sur son claros ejemplos de la ambigüedad del Derecho Internacional.

Margareta Donos-Stroot, periodista moldava y autora de este artículo sobre la situación geopolítica en su país.