Con el resultado de las últimas elecciones generales del pasado 26 de abril, y las declaraciones opositoras de Jaime Nebot y Lucio Gutiérrez contra el gobierno de Rafael Correa, y de hecho de la tendencia que apoya su gestión, se confirma la fortaleza que la oposición tendrá para los próximos años. Oposición que, de inicio, se ha unido para declarar que ha existido fraude electoral en los últimos comicios, resultado de lo cual, los candidatos a asambleístas del Movimiento Madera de Guerrero (Cynthia Viteri y Enrique Herrería) y el Partido Sociedad Patriótica (Luis Almeida), entre otros, arremetieron contra las instalaciones del centro de computo de contingencia en Guayaquil, como lo informaron autoridades del Consejo Nacional Electoral (CNE), y hasta habrían exigido la nulidad de las elecciones. Hecho que, según Rafael Baustista, analista político boliviano, en su artículo denominado: “El cinismo de la oposición política”, y publicado en la página electrónica de América en Movimiento, confirma que “si la oposición pierde algo está dispuesta a que todos pierdan todo; amenaza con destruir todo si ella pierde algo. Su amenaza se convierte en su fuerza y esa fuerza permite la soberbia que presume su ventaja: si acaba con todo”. Estas palabras las dice luego de un análisis de la conformación y estrategias utilizadas por la oposición boliviana y venezolana contra el gobierno de Evo Morales y Hugo Chávez. Oposición que no actúa sola sino con una red establecida, con ayuda extranjera, en varios países de América Latina, especialmente en Venezuela, Bolivia y Ecuador.

Esto es confirmado por un artículo publicado por la organización: Tribunal Dignidad, Soberanía y Paz Contra la Guerra, donde se asegura que la actitud de la oposición se encuentra enmarcada en valores groseramente manipulados, con el propósito de proteger los sacralizados intereses económicos y políticos estadounidenses. “Para esos fines, Estados Unidos, a través de la CIA, ha intervenido directamente en los procesos electorales y democráticos de América Latina, para lo que ha desarrollado planes de guerra psicológica en los medios de comunicación social, e invertido millones de dólares, y así se opuso al triunfo de Salvador Allende en Chile, de Daniel Ortega en Nicaragua y lo mismo en Brasil, Honduras, El Salvador, Guatemala”. Denuncia que en el caso de Ecuador fue ratificada por el Presidente de la República Rafael Correa, el pasado 22 de agosto de 2008, cuando ratificó que líderes universitarios de Venezuela estuvieron en Ecuador enseñando tácticas a la oposición para generar violencia antes del referendo constitucional del 28 de septiembre. "La misma táctica la aplicaron contra (el presidente venezolano Hugo) Chávez: empujar a líderes juveniles, universitarios, para crear confrontación y echarle la culpa al gobierno", afirmó Correa.

Es necesario recordar que en esos enfrentamientos estuvieron involucrados altos personeros del Municipio de Guayaquil e hijos de empresarios guayaquileños, que habrían estado presentes en las charlas con Geraldine Álvarez, Yon Goicoechea y Gustavo Tovar-Arroyo, lideres universitarios de la oposición en Venezuela. A este apoyo extranjero, que según denuncias públicas, han sido financiadas por varias ONG norteamericanas influenciadas por la CÍA, se suma el apoyo de empresarios privados, que junto a Jaime Nebot, han sido la cabeza visible de la oposición desde el inicio del Gobierno de Alianza País. Acción que ahora se fortalecerá con el apoyo que ha recibido la mayoría de alcaldes reelegidos y electos en la provincia del Guayas, para, según dicen, conformar el nuevo Consejo Provincial en la nueva conformación política que establece la nueva Constitución. Burgomaestres que pertenecen al PSP, RED, PRE, UNO, UDC y del movimiento Nobol Libre, la mayoría de oposición al Gobierno.

En el caso Lucio Gutiérrez, la vinculación con la CÍA es evidente. El analista político Fausto Abad Zúniga, en un artículo titulado: “Lucio y la CIA”, publicado el 08 de junio del año anterior, asegura que Correa no conoce de los nexos de Lucio Gutiérrez con la CIA desde que fue Edecán de Abdalá Bucarám, y posteriormente del ex presidiario Fabián Alarcón. Un simple coronel, con su salario, sobre todo el que se percibía cuando dio el golpe contra Mahuad, no podía comprar dos departamentos en El Condado, en Quito, y vivir de sus rentas, junto con las casas que tenía en la Floresta, puesto que en sus declaraciones ante la prensa reveló que vivía de los arriendos y de su retiro obligado. “¿Cómo adquirió esos bienes? Sencillamente porque fue reclutado como Agente de la CIA desde 1996, para seguir los pasos presidenciales de cerca. Este reclutamiento sucede en todos los regímenes con de personas cercanas al poder, como los Jefes de inteligencia de la casa Presidencial y los Jefes de Inteligencia del Ejército y más ramas de las FFAA y Policiales” asegura Abad.

La oposición se arma lentamente con dos líderes de la derecha ecuatoriana: Jaime Nebot y Lucio Gutiérrez. Aunque se pensaba que el único adversario fuerte del Gobierno estaba en Guayaquil, ahora podría estar en toda la provincia del Guayas, oposición a la que se suma Lucio Gutiérrez, que tiene un apoyo máximo en el Oriente y varias provincias del centro ecuatoriano. Gutiérrez y Nebot: Una oposición que se fortalece.