Escuelas con infraestructura en pésimo estado, condiciones precarias para los estudiantes y sus maestros con salarios bajos y falta de formación continua: son el resultado de treinta años de la educación en manos del neoliberalismo; la despreocupación de ese “modelo”, causó el cierre de cerca de 5 mil instituciones educativas por falta de recursos, mismas que no han vuelto a ser reabiertas, causando un grave daño al pueblo ecuatoriano.

En la actualidad, el Ecuador atraviesa una nueva etapa en su historia: con cambios favorables para su pueblo, que inicia con una nueva Constitución producto de la lucha y participación de los sectores populares, que en una muestra de rebeldía a la miseria e inequidad le apuestan a los sectores democráticos y de izquierda. En este contexto, las leyes empiezan a reformarse en varios campos, uno de ellos y el más importante para el desarrollo de la sociedad es la educación en todos sus niveles.

Con este antecedente y con el afán de mejorar la educación como un área estratégica para el desarrollo del país, la Unión Nacional de Educadores (UNE) ha realizado una ‘Propuesta de Ley de Educación con Participación Social’, la misma que ha sido trabajada desde años atrás en el Congreso Nacional de Educación , con la propuesta de Educación para la Emancipación , la misma que recoge las principales necesidades de los sectores involucrados como son los estudiantes, docentes y padres de familia.

“Consideramos necesario que la ley de educación debe surgir de quienes la necesitan y de acuerdo a la realidad del país, pues una ley es válida cuando se construye con los principales actores y todos se comprometen a cumplirla y llevarla adelante” opina Mariana Pallasco, Secretaria nacional de la UNE.

El proyecto recoge planteamientos clave para el verdadero cambio en pro de la educación ecuatoriana, todo esto en concordancia con lo establecido en la Constitución, que reconoce a la educación como un derecho mas no como un servicio. “En la nueva ley orgánica de la educación se debe garantizar la misma como un derecho irrenunciable y que el Estado no pueda evadir esa responsabilidad como tal, ya que en la actual ley se lo reconoce como un servicio”, afirma Pallasco.

Como derecho irrenunciable de todos los seres humanos, los docentes presentan propuestas en los ámbitos de: Fines del Sistema Nacional de Educación; Políticas de la Educación Nacional; Currículo de estudios; Evaluación del sistema; Investigación Educativa; Estructura Académica Intercultural del Sistema Educativo Nacional; Organización y Administración del Sistema Educativo; Actualización y Perfeccionamiento Docente; De la Infraestructura, bienes y servicios del sistema educativo; Servicios; Financiamiento del Sistema Educativo.

Todos estos aspectos enfocados en el ámbito de inclusión y respeto a los derechos humanos, al medio ambiente, a la democracia, a la interculturalidad, impulsando la equidad de género, la justicia, la libertad y la solidaridad. Además promueve la coeducación y el desarrollo del pensamiento científico, crítico e innovador.

Un elemento muy importante que se ha incluido en esta propuesta es la creación de los Consejos Nacionales, Provinciales y Cantonales de Educación, que serán los organismos permanentes de planificación, dirección y control de la ejecución de las políticas y estrategias elaboradas por el Congreso Nacional de Educación.

Estos organismos contarán con la participación de un representante del Ministerio de Educación, un representante de la UNE, un representante de la Educación Bilingüe , un representante de la Confederación Ecuatoriana de Establecimientos de Educación Católica (CONFEDEC) , un representante de la Confederación de Colegios Particulares Laicos del Ecuador (CONFEDEPAL), un representante de AFEFCE, un representante de los Institutos Pedagógicos, un representante de la FESE, un representante de los padres de familia y un representante de los sectores productivos .

Humanista, incluyente y solidaria, así es la propuesta de educación impulsada por la UNE y los sectores populares, con afán de mejorar la educación y seguir formando profesionales críticos y más comprometidos con la sociedad, que continúan su lucha incansable, hasta la victoria. (JTC)

¡La UNE no se quiebra!

Las constantes muestras de represión por parte del agonizante neoliberalismo, hacia quienes luchan por cambiar y mejorar la educación para el progreso del país, es más notoria hoy: con una evaluación meramente tecnócrata a los maestros, quienes al resistirse han sido separados de sus puestos de trabajo y recientemente con un acuerdo ministerial que de forma ilegal elimina los aportes de los docentes a la UNE.

La ilegalidad se manifiesta claramente, pues los argumentos del ministro Raúl Vallejo son inconsistentes, ya que trata de convencer que el descuento se lo hace a todo el magisterio, cuando en realidad este aporte solamente lo hacen quienes de manera voluntaria se afiliaron al gremio. “El ministro de Educación no se acuerda de que en el año 2008 aprobó los estatutos de nuestra organización, la misma que en su art. 48 determina que los maestros AFILIADOS aportarán en 1.5% de su sueldo básico”, asegura Patricio Carrera , Secretario Nacional de Comunicación de la UNE.

Este intento de golpear y dividir a una de las organizaciones populares más importantes del país, ha despertado la indignación de los maestros, quienes han presentado una demanda de inconstitucionalidad y exigen que se le cumpla su derecho a la organización, pues a pesar de estos ataques constantes este gremio se fortalece cada día más. “El ministro de Educación se equivoca si piensa que con eso va a doblegar a esta organización, no la han podido derrotar ni las dictaduras, y aunque intenta hacer lo mismo que su coideario el Arq. Alfredo Vera Arrata que quiso retirar de igual manera los aportes, no lo pudo hacer, porque los mismos profesores fueron personalmente a realizar su aporte igual que lo harán hoy”, culmina Carrera. (JTC)