Collin Peterson

De acuerdo con el documento, citó la Agencia Francesa de Prensa (AFP), se prohibiría al Presidente estadounidense que impida a los ciudadanos de su país viajar a la Antilla Mayor, o sancione cualquier tipo de gasto relacionado con ese viaje, excepto en caso de guerra o de emergencia sanitaria o de seguridad entre ambas naciones.

El proyecto de legislación fue presentado por el presidente del Comité de Agricultura de la Cámara Baja, el demócrata Collin Peterson, y cuenta con alrededor de treinta copatrocinadores, entre ellos — señala la AFP— los republicanos Jerry Moran (Kansas), Jeff Flake (Arizona) y Jo Ann Emerson (Missouri).

"Que ayudemos a Cuba es bueno para la economía estadounidense y para el pueblo de esa nación. Este proyecto de ley aumenta la capacidad de nuestros agricultores para vender sus productos a la Isla”, explicó Peterson en un comunicado, de acuerdo a reportes de la agencia española EFE.

Esa medida deberá ser sometida en las semanas próximas a diversas audiencias en el Comité de Agricultura de la Cámara Baja, aunque también deberá ser estudiada en el Comité de Asuntos Exteriores, según fuentes legislativas.

Peterson se quejó de que las “trabas burocráticas” y las “prohibiciones arbitrarias” para que los estadounidenses puedan viajar a Cuba han servido de obstáculo para las ventas agrícolas al vecino territorio caribeño.

El proyecto de ley presentado, al decir del legislador Peterson, quien representa al estado de Minnesota, persigue eliminar las trabazones y permite los viajes y el comercio.

En el presente solo a los cubano-americanos se les autoriza viajar a su país de origen, sometido desde hace medio siglo a un férreo bloqueo económico, financiero y comercial por diversas administraciones de Estados Unidos.

Cualquier otro estadounidense tiene que conseguir autorización previa para hacerlo e, incluso, puede ser condenado a pagar una multa si no disponen del documento.

El nuevo proyecto contempla, además, facilitar las exportaciones de productos agrícolas de Estados Unidos hacia Cuba, autorizando a La Habana a pagar directamente a sus proveedores.

Desde el año 2000 los agricultores de EE.UU. pueden vender sus productos a la Isla, pero el gobierno cubano debe de pagar sus importaciones al contado antes de recibirlas, sin créditos financieros. La mercadería no puede ser transportada por buques de la mayor de las Antillas. No se permite el comercio desde La Habana.

El Acta para “Reformar las Restricciones de Viaje y Mejorar las Exportaciones” está encaminada a eliminar tanto la necesidad actual de recurrir a bancos en otras naciones para realizar las ventas agrícolas a Cuba, así como las cuotas que suelen acompañar tales permisos.

En concreto, la medida bipartidista persigue que las ventas agrícolas de la Isla posean similares requisitos de pago que las realizadas por parte de EE.UU. a otros países.

Significa que, contrario a la norma actual, los cubanos no tengan que pagar por adelantado antes de zarpar el buque de puerto estadounidense. Además, la iniciativa permite los viajes de norteamericanos a Cuba.

Agencia Cubana de Noticias