El Plan Ecuador fue lanzado oficialmente el 24 de abril de 2007, como contraparte al fracasado Plan Colombia, una propuesta de “paz”.

Pero ¿qué es el Plan Ecuador? Actúa en las provincias de Esmeraldas, Carchi, Sucumbíos, Orellana e Imbabura. Básicamente es una propuesta para mantener la presencia del Estado en la frontera norte, brindando infraestructura a esta zona y, sobre todo, sirviendo como “un aporte a la seguridad en la región y a la soberanía nacional”, según la Secretaría Técnica del Plan Ecuador.

Posee además 7 ejes de intervención, entre los que es necesario tomar en cuenta: la administración de justicia y control de ilícitos, que busca fortalecer los sistemas de inteligencia nacional, en franca lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado -entiéndase insurgencia colombiana; y la protección a las amenazas externas que atenten contra la seguridad del Estado, que en la parte pertinente dice: “el Ecuador se abstendrá de participar en operaciones combinadas, coordinadas o conjuntas de carácter militar con Colombia”. Así lo señalan, pero la realidad parece decir lo contrario.

El Plan Ecuador no ha dado sus frutos, ya que la población en la frontera norte hasta el momento no siente los beneficios que se generan de esta propuesta. El pasado 9 de enero, el mismo presidente Correa señaló que el Plan Ecuador no ha funcionado bien y le dio plazo de 6 meses.

Al parecer se confundieron a propósito, ya que la propuesta escondería un trasfondo más militar que de paz, o peor de atender a los habitantes en el interminable abandono que hasta ahora padecen.

Dicho plan juega un papel fundamental dentro de la estrategia imperialista de regionalizar el conflicto colombiano y hacernos partícipes. Con el apoyo y financiamiento de la USAID, se realizan proyectos de infraestructura básica en la zona de frontera norte. Sabido es a quién responde este organismo que está involucrado con la CIA, o mejor, es el brazo caritativo de la CIA.

El Plan Ecuador cuenta con cerca de 135 millones de dólares para financiar proyectos de seguridad y desarrollo social en la frontera, pero en estrecha cooperación con los gringos, a través de la USAID. Dos de los proyectos que Plan Ecuador y la USAID impulsan es el Programa Integrado de Desarrollo Municipal (PIDEM) y el Proyecto de Desarrollo de Empresas Locales (PRODEL), disfraces de obra social, que permiten la injerencia en los gobiernos seccionales, en la población y su participación en la vida política en la zona fronteriza.

Desde el 2001 al 2008 la USAID ha invertido cerca de 85 millones de dólares. Nadie regala plata porque sí, existe de trasfondo un interés, primero de mantener presencia en las comunidades de la zona de frontera, lograr posicionarse en vista de asaltar los recursos que encierra la amazonia ecuatoriana, el agua, biodiversidad, petróleo, etc. Y evidentemente, hacer un trabajo ideológico contra la insurgencia del pueblo colombiano, para tener un inventario y censo de la población que habita en la frontera y para facilitar la “gobernabilidad” en esta zona.

Bajo este telón, se pueden evidenciar los tentáculos de la embajada norteamericana, cuya embajadora, cual visitadora social, inaugura “obras” y SUPERVISA la acción militar y policial, de paso; pero además, contrariamente a lo que predican, se evidencia que sí existen acciones conjuntas a nivel militar y policial. Así lo muestran algunos medios de comunicación bajo el título: Operación conjunta entre militares colombianos y ecuatorianos ataca a guerrilla de las FARC, del pasado 22 de enero.

El papel asignado al Ecuador en el Plan Colombia se estaría cumpliendo, la famosa CONTENCIÓN de la que hablan los altos mandos militares es, en sí, el YUNQUE.

Según la nota de prensa, militares ecuatorianos atacaron a un grupo de guerrilleros que huían del ataque del ejército colombiano, donde murieron tres personas. Y por parte del ejército colombiano asesinaron a nueve guerrilleros, incluidos una mujer y dos menores, en los mismos operativos.

De estos resultados sospechosos, ya que habitantes de la zona denunciaron que los tres muertos por el ejército ecuatoriano serían campesinos, el presidente narcoparamilitar Álvaro Uribe agradeció al Gobierno ecuatoriano "el esfuerzo que ha hecho recientemente en el área de frontera" contra las FARC, mientras el Ministerio de Defensa colombiano confirmaba que el Ejército ecuatoriano realizó en las últimas horas varias operaciones en la frontera para capturar a guerrilleros en al menos tres campamentos.

Es necesario denunciar estos hechos, el involucramiento del país en el Plan Colombia, la injerencia, ahora legalizada, del imperialismo norteamericano, y los crímenes que se están cometiendo en la zona de frontera a pretexto de combatir el narcotráfico, que por cierto ahora es más fuerte a pesar de que irónicamente el ejército y la policía tiene presencia activa en esta zona.