La culminación del Foro de Comunicación Social “Artillería del Pensamiento vs. Fábrica de Mentiras- El Caso Libia” llevado a cabo en la ciudad de Caracas (Venezuela) entre el 04 al 06 de setiembre del presente, ha proyectado interesantes apreciaciones en cuanto a política internacional y comunicaciones globalizadas.

El Foro auspiciado por el diario venezolano “Correo del Orinoco” en ocasión de su segundo aniversario de relanzamiento y efectuado en el “Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos” (CELARG), contó a lo largo de tres días con ponentes de renombre internacional en materia de política internacional, comunicación social y tecnologías de la información.

En él participaron –junto con otros ponentes más-, el politólogo mexicano Alfredo Jalife, la periodista argentina Stella Calloni y el economista venezolano Julio Escalona, cuyas intervenciones reseñamos en estas líneas.

En primer término, el reputado catedrático de “Globalización” de la UNAM y columnista del diario mexicano “La Jornada”, Alfredo Jalife, inició su participación describiendo las corrientes políticas vigentes aseverando que, “en la actualidad, la dicotomía -política- de derecha ó de izquierda, ya es falsa”.

Especificó que “esa dicotomía era del siglo XIX y el siglo XX”, y que, “hoy vivimos otros tiempos; estamos en el siglo XXI”.

Jalife definió con énfasis que, “en el siglo XXI, la nueva dicotomía es que, ó se está con la globalización, que va a buscar el saqueo nacional, ó se es nacionalista y patriota, no importa si se es de derecha ó de izquierda”.

El analista mexicano alertó a la opinión pública latinoamericana, a que “no hay que caer en esa trampa” –la de derecha ó izquierda- previniendo sobre la falacia en la que aún se cobijan mañosamente, personajes y grupos de la política latinoamericana.

Al abordar el tema de las agresiones militares colonialistas de EE.UU. y la UE contra países del orbe y el comportamiento de los medios de comunicación, señaló que en el caso de la agresión contra Libia “lo primero que vimos fue la desinformación” –la mentira-, agregando que “los canales se prestaron al juego, antes, durante y después”, asociando en ello a “los canales de TV libios, los del mundo y las agencias de prensa, con sus informaciones globalizadas falsas”.

A ese engaño mediático mundial, Jalife lo nombró como “la globalización de la desinformación”, incorporando con ello una nueva denominación para conceptuar lo que señaló como, “una sarta de mentiras, con las que –la globalización financiera y los medios- mienten sobre sus finanzas, mienten sobre sus cuentas y realizan guerras mintiendo”. En cuanto al rol que cumplen esos medios globalizados, Jalife los clasificó como “medios mendaces”.

Al ser preguntado sobre aquello que Venezuela ó Latinoamérica deberían hacer en caso una pretendida agresión militar, para evitar la difusión de esa “información” basada en el engaño, manifestó que “la población lo mejor que puede hacer, es no ver esos canales; hay que cerrarlos, hay que apagarlos”, agregando, “hay que boicotearlos, están intoxicando”.

Sobre los medios de comunicación que apoyan la globalización financiera, señaló que “–todos ellos- apoyan lo mismo, apoyan la acumulación y el saqueo, como en Irak y Afganistán; ahora han apoyado la “Operación Odisea”-Libia-; eso es un bandidaje”, ratificó. Mencionó que, “ahora se saquea primero –congelación internacional de activos- y luego se bombardea”, recordando que “en épocas de “La Odisea” la cosa era al revés, se saqueaba después de la guerra”.

Para combatir el engaño, Jalife exhortó a “establecer la verdad, como antítesis de la globalización de la desinformación a través de una guerrilla mediática universal”.
Iniciando su ponencia en el Foro, la periodista argentina Stella Calloni, escritora, investigadora, “Premio Latinoamericano de Periodismo” 1986 y autora del libro “Operación Cóndor”, condenó “a todos los actores que desvirtúan, manipulan y tergiversan la información para permitir crímenes de lesa humanidad”.

Calloni dijo que, “los pueblos latinoamericanos no podemos permitir que otro genocidio suceda ante nuestros ojos”. Dirigiéndose a todos los latinoamericanos, añadió que “Africa es nuestro espejo”.

En cuanto a América Latina, refirió que “nuestro continente está en un momento único en su historia y por tal motivo –opina-, los peligros van a recrudecer”.

Citó como pruebas de lo que mencionaba “los intentos de golpe de Estado planificados y ejecutados por los EE.UU., primeramente en Venezuela en el 2002 a través de militares y en Ecuador en el 2010 mediante la fuerza policial” -finalmente frustrados-.
Sobre el rol cumplido en Libia por los medios de comunicación alternativos latinoamericanos, en contraparte con “la desinformación” de las grandes cadenas, Calloni señaló que “sin ellos estaríamos muy mal, porque fueron los únicos que permitieron romper la barrera de la desinformación o del silencio".

Manifestó Calloni, que “si no fuera por “TeleSur”, “Prensa Latina” y por otros medios latinoamericanos, hubiéramos tenido una información falsificada”.

A su turno, el otro exponente del Foro, Julio Escalona, venezolano, economista, historiador y Embajador Alterno de su país en la ONU, señalando el rol cumplido por la organización mundial en la agresión a Libia, dijo que “a la ONU hay que quitarle ese manto de respetabilidad que le queda, porque ha sido colonizada por Estados Unidos y las potencias del norte”.

Manifestó que a su entender, “el Secretario General de la ONU, Ban Ki-Moon, es un funcionario del Departamento de Estado de Estados Unidos”. Reafirmándose en ello, expresó “no sé si le pagan, pero es por lo que él hace, que puede ser considerado un funcionario estadounidense”. Para Escalona, “las Naciones Unidas se han convertido en una instancia que convalida invasiones y abusos”.

Sobre las medidas adoptadas por el Consejo de Seguridad dijo que, “en la ONU, la decisión de invadir estaba tomada ya –por EE.UU. y la OTAN-; lo único que había que hacer era legitimarla”.

El analista venezolano es de opinión que “en el mundo actual, la guerra es la primera instancia de las relaciones internacionales”, añadiendo “no es la paz, ni la negociación, es la guerra”. Agregó que “ahora, la política justifica a la guerra”.

Sostuvo además que el recurso de los pueblos para combatir estas agresiones orquestadas, es “la creación de una red de redes a nivel internacional, capaz de derrotar la hegemonía comunicacional que se impone desde los centros de poder y para así fomentar la conciencia en la sociedad”.

Culminando su participación, Julio Escalona expresó, que en su criterio “el capitalismo financiero mundial, tiene planeada –tal como la tuvo Hitler- una solución final”.
Y a su entender, “esa solución final, es la liquidación física y espiritual de los pobres, y en ella, la guerra cumple con esa labor de profilaxia política”.

Esto último, nos sugiere una interrogante, ¿ es que acaso, no habrá también un juicio de Nuremberg para los impulsores y cómplices de estas guerras de saqueo ?