20-11-2014

Ha anunciado con subrayado entusiasmo, el virtual candidato presidencial nacionalista y ministro del Interior, Urresti, que en pocas semanas, más 10 mil efectivos policiales encubiertos estarán en las calles. La contradicción es flagrante: ¿está previniendo a la delincuencia para que tome sus medidas y antídotos?

En Perú nada es raro y todo puede ocurrir, hasta que llueva para arriba o que un ministro opine de fútbol, federaciones, policías encubiertos, la inmortalidad del mosquito y asuntos conexos y alcance niveles de aprobación muy altos. ¿Han disminuido los crímenes, asaltos, delitos con la gestión del sonoro militar a cargo de la cartera? Tengo mis sospechas que el tema es al revés: los cacos están haciendo una fiesta violenta.

Hace años, contaba un viejo político ya desaparecido, en pleno centro de Ciudad de Panamá, apareció un letrero muy vistoso y enorme que decía: "Policía Secreta". Para el régimen dictatorial de entonces, la estupidez le era propia y casi como parte de su nivel mínimo de inteligencia. En este caso, los términos secretos y encubiertos, caminan por alamedas del ridículo más estrafalario del que se tenga memoria en los últimos tiempos.

Cuando, semanas atrás, la acción policial incurrió en Cajamarca en el violentismo bestial so pretexto de un desalojo ordenado por el Poder Judicial y que costó la vida de un ciudadano, el ministro Urresti, con torpeza de paquidermo, anunció que era inminente que se establecieran las "responsabilidades administrativas" del autor del crimen. Hasta hoy, libre y sin mayores problemas ese sujeto se pasea por Cajamarca o por cualquier ciudad del país.

Entonces compruébase que el asunto no es en torno a la seguridad ciudadana ni a la custodia de la sociedad en su conjunto: se trata, más bien, de un tinglado o plataforma para que el ministro Urresti prefigure la opción electoral del partido oficialista. ¿Con qué derecho se gasta con tanto ahínco, bombos y platillos, el dinero del pueblo?

Pan y circo advirtieron los romanos. ¿Se cumple el aforismo en nuestro Perú? Circo hay para todos los gustos y calibres y un actor vocinglero cumple su papel con el brillo que los miedos de comunicación se encargan de subrayar. País con actores políticos fronterizos, hundidos en ciénagas de inmoralidad con nombre propio, miopes ineptos de pensar en la nación y en su destino como conjunto social, las golosinas que en forma de noticias propala el ministro Urresti, cumplen su cometido mediático. ¿Se edifica así la nacionalidad, con mentiras y bufonadas, una tras otra?

¿Creerá el ministro Urresti que los rateros están huérfanos de información o que están desprovistos de cuadros o buenos manejadores de pistolas, revólveres, ametralladoras y cuanta arma letal se les ponga en las manos? Cuando Urresti anuncia con tanta saliva que efectivos encubiertos y policiales saldrán a patrullar, ¿qué nos garantiza que no estén infiltrados ya los cacos y criminales? Las bandas operan en todo el país y roen sus instituciones desde adentro y en eficaz forma. ¿O no es así?

Mi modesta impresión es que hay unos idiotas cuya medida o tasación del resto de los peruanos, es su "auto-crítica" y por tanto, quieren hacer pasar gato por liebre. Los asesinatos campean, los crímenes acechan impunes y la delincuencia discurre por Perú como Pedro por su casa y los asesores se contentan con presentar al titular del Interior por televisión y diarios y con eso ¡punto!.

¿Qué dicen los peluqueros sociales, esos que viven del dinero de la cooperación externa o la de gobierno a gobierno, sin pagar impuestos, o están tan ocupados en sus consultorías que no les queda tiempo para denunciar las genuinas imposturas cotidianas? En Perú la verdad NO interesa, sólo vale lo que grupúsculos quieren que se crea y para la conveniencia de las pandillas.

¿Usará la policía encubierta credenciales de neón? ¡No sería raro porque el perfil de Urresti gusta del ruido y no le hace ascos a la figuración por más inane y boba que fuese la puesta en escena!

Cuando un país navega en la estupidez masiva, los débiles mentales, aparecen salvadores y Mesías ultra necesarios. Y el en el pórtico del año electoral 2015, eso es urgente para las taifas políticas.

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