El presidente francés Francois Hollande está en busca de un sustituto para su ministro de Relaciones Exteriores, Laurent Fabius.

Dos fuentes paralelas en París han confirmado a la Red Voltaire que el actual jefe de la diplomacia francesa padece el Mal de Parkinson. Para evitar la aparición de los temblores característicos de esa enfermedad, el señor Fabius se ve obligado a tomar cada 2 horas el fármaco oral conocido como levodopa (L-3,4 dihidroxifenilalanina). Por desgracia, ese medicamento, considerado como el más eficaz para el tratamiento del Mal de Parkinson, es también conocido por sus efectos secundarios y provoca al señor Fabius agudas crisis de paranoia.

En julio de 2014, el presidente Hollande impuso al ministro Fabius la nominación de un nuevo secretario general en el ministerio de Relaciones Exteriores, Christian Masset (ex consejero de Hubert Vedrine), encargado de aligerar el trabajo del ministro [1]. A pesar de ello, el estado de salud del jefe de la diplomacia francesa se ha agravado considerablemente desde aquel momento.