Durante la reunión del Grupo Internacional de Apoyo a Siria (GIAS) en Viena, el 14 de noviembre de 2015, Alemania, la Unión Europea, Egipto, Jordania, Irak, Irán, Italia, Qatar, China, el Líbano, la Liga Árabe, los Emiratos Árabes Unidos, Omán, la Organización de Naciones Unidas, Rusia, Arabia Saudita, el Reino Unido, Estados Unidos, Turquía y Francia estudiaron las soluciones para resolver lo más rápidamente posible el conflicto en Siria. Al inicio de la reunión, los participantes observaron un minuto de silencio en homenaje a las víctimas de los horribles atentados perpetrados en París el 13 de noviembre, así como en Beirut, en Irak, en Ankara y en Egipto. Los miembros del Grupo condenaron enérgica y unánimemente estos violentos ataques contra civiles y expresaron su solidaridad con el pueblo francés.

Los participantes procedieron después a un diálogo constructivo con el fin de ratificar los progresos alcanzados en la anterior reunión del 30 de octubre. Los miembros del GIAS proclamaron unánimemente la urgente necesidad de poner fin a los sufrimientos del pueblo sirio, a la destrucción física de Siria, a la desestabilización de la situación en la región y al aumento, en ese sentido, del número de terroristas implicados en las operaciones en Siria.

Los miembros del GIAS reconocieron la existencia de un estrecho vínculo entre el cese del fuego y el proceso de paz, que avanza paralelamente conforme a los términos del Comunicado de Ginebra de 2012, así como la necesidad de actuar rápidamente en ambos sentidos. Expresaron su apego a una transición política dirigido por los sirios y por iniciativa de los sirios, en base a los términos del Comunicado de Ginebra.

El GIAS ha decidido apoyar la puesta en vigor del cese del fuego a nivel nacional en Siria en cuanto los representantes del gobierno sirio y de la oposición den los primeros pasos hacia la transición, bajo el auspicio de la ONU y en base a los términos del Comunicado de Ginebra. Los 5 miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU se comprometieron a apoyar la resolución del Consejo de Seguridad para conceder un mandato a la misión para el seguimiento del cese del fuego aprobada por la ONU en las regiones del país donde los observadores no estén bajo la amenaza de ataques terroristas así como a respaldar la transición política conforme a los términos del Comunicado de Ginebra.

Todos los miembros del GIAS se comprometieron, a título individual como países y partidarios de alguna de las partes beligerantes, a hacer todo lo posible por garantizar el respeto del cese del fuego por parte de los grupos o individuos de quienes son partidarios, a quienes aportan un apoyo material o sobre los que ejercen influencia. El cese del fuego no incluirá las acciones ofensivas o defensivas contra Daesh [el Emirato Islámico], el Frente al-Nusra u otros grupos que los miembros del GIAS designarán como terroristas.

Los participantes saludaron la declaración del Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, quien transmitió a la ONU la directiva de acelerar la elaboración del plan de respaldo al cese del fuego a nivel nacional. El Grupo se concertó para que la ONU supervise los esfuerzos, en consulta con las partes interesadas, con el fin de determinar las necesidades y procedimientos relativos al cese del fuego.

El GIAS dijo estar dispuesto a emprender de inmediato pasos con vista a estimular las medidas tendientes a fortalecer la confianza, medidas que contribuirían a viabilizar el proceso de paz y crearían las condiciones para un cese del fuego a nivel nacional. En ese contexto y de conformidad con el punto 5 del Comunicado de Viena, el GIAS mencionó la necesidad de adoptar medidas para garantizar un acceso operativo de las organizaciones humanitarias al conjunto del territorio sirio de conformidad con la resolución 2165 del Consejo de Seguridad de la ONU y también llamó a satisfacer los actuales pedidos de la ONU en cuanto a las entregas de ayuda humanitaria. El GIAS expresó preocupación por la situación deplorable de los refugiados y de las personas desplazadas así como por la necesidad de crear condiciones para su regreso seguro en virtud de las normas del derecho humanitario internacional y teniendo en cuenta los intereses del país de acogida. La solución de los problemas de los refugiados es de gran importancia para la solución del conflicto sirio. El GIAS también confirmó las consecuencias destructivas del uso de armamento que afecte indiscriminadamente a la población civil y el acceso de las organizaciones humanitarias, tal como se subraya en la resolución 2139 del Consejo de Seguridad de la ONU. El GIAS se concertó para presionar a las partes para impedir de inmediato el uso de cualquier armamento que tenga efectos indiscriminados.

El GIAS reafirmó que es importante respetar todas las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU en ese sentido, entre ellas la resolución 2199 sobre la lucha contra el tráfico de petróleo, de objetos de valor cultural y de rehenes que los terroristas utilizan para obtener fondos.

De conformidad con los términos del Comunicado de Ginebra de 2012, mencionados en la Declaración de Viena del 30 de octubre así como en la resolución 2118 del Consejo de Seguridad de la ONU, el GIAS reconoció la necesidad de organizar, bajo el auspicio de la ONU, negociaciones oficiales entre los representantes del gobierno sirio y la oposición antes del 1º de enero de 2016. El Grupo saludó los esfuerzos realizados en el marco del trabajo conjunto con, entre otros, el enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, con el fin de garantizar la participación más amplia posible de las fuerzas de oposición seleccionadas por el pueblo sirio, [fuerzas] que seleccionarán a sus representantes en las negociaciones y determinarán sus posiciones, lo cual permitirá iniciar el proceso de paz. Todas las partes del proceso de paz deben atenerse a los principios conductores formulados en la reunión del 30 de octubre, como el respeto de la unidad, la independencia, la integridad territorial y el carácter laico de Siria; garantizar la integridad de las instituciones públicas; defender los derechos de todos los sirios, independientemente de la etnia o la religión a la que pertenezcan. Los miembros del GIAS reconocieron que dichos principios son fundamentales.

Los miembros del GIAS expresaron nuevamente su apoyo al proceso de paz mencionado en el Comunicado de Ginebra de 2012. En ese sentido, el Grupo reiteró su apoyo al cese del fuego, en las condiciones anteriormente mencionadas, así como al proceso realizado bajo la supervisión de los propios sirios con el objetivo de crear, de aquí a 6 meses, un sistema de administración confiable, inclusivo y no confesional, y de determinar los plazos y procedimientos para la elaboración de la nueva Constitución. De aquí a 18 meses deben organizarse elecciones libres y justas, conformes a la nueva Constitución. Ese escrutinio debe ser supervisado por la ONU respetando exigencias de la estructura dirigente anteriormente mencionada y de las más altas normas internacionales de transparencia y de seguimiento, garantizando la participación de todos los sirios, incluyendo representantes de las diásporas.

En lo concerniente a la lucha contra el terrorismo y en virtud del punto 6 del Comunicado de Viena, el GIAS confirmó que Daesh, el Frente al-Nusra y otras organizaciones terroristas reconocidas como tales por el Consejo de Seguridad de la ONU y cuya lista será elaborada por los participantes y aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU, deben ser derrotadas. El Reino Hachemita de Jordania aceptó contribuir en la elaboración, por los representantes de los servicios de inteligencia y del ejército, de una comprensión común que haga posible reconocer a grupos e individuos como terroristas para llegar a ese compromiso de aquí al inicio del proceso de paz bajo el auspicio de la ONU.

Los participantes tienen intenciones de reunirse nuevamente en cerca de un mes para establecer un primer balance de los intentos de instaurar el cese del fuego e iniciar el proceso de paz.

Traducido al español por la Red Voltaire