El príncipe Mohamed ben Salman anunciará, el 25 de abril de 2016, la visión del rey Salman sobre el futuro de Arabia Saudita.

Se trata, fundamentalmente, de un plan tendiente a pasar de una economía basada en el petróleo a una economía sin petróleo.

Para ello, el reino saudita crearía un fondo soberano de inversiones ascendente a 2 000 millardos de dólares [1 millardo = 1 000 millones]. El proyecto incluye la implantación de una serie de tasas –pero no impuestos directos– para reunir 100 millardos de dólares en los 4 próximos años. El reino también prevé dejar de subvencionar la gasolina, la electricidad y el agua.

También habría varias medidas tendientes a modernizar las costumbres en Arabia Saudita y una de ellas sería conceder a las mujeres el derecho a conducir automóviles.

Numerosos economistas han expresado escepticismo en cuanto a la posibilidad de modernizar el reino saudita. Varios planes anteriores, mucho menos ambiciosos, fracasaron debido a las condiciones del mercado saudita del trabajo. En Arabia Saudita, el 80% de la fuerza de trabajo es extranjera.