Ya habíamos precisado anteriormente que la causa número uno de la expulsión de Ahmet Davutoglu de su puesto de primer ministro tenía que ver con el paso de Turquía a un régimen presidencial de gobierno. Ahora sabemos que la decisión fue tomada en realidad después de su viaje a Diyarbakir, el 1º de abril de 2016.

El primer ministro Davutoglu se comprometió entonces a poner fin a la «guerra contra el terrorismo» si el PKK deponía las armas, posición que contaba con el respaldo de la Unión Europea.

Pero no es del agrado del presidente turco Racep Tayyip Erdogan, quien –por el contrario– pretende despojar de su ciudadanía turca a todos los partidarios del PKK y, por consiguiente, no desea llegar a ningún tipo de arreglo con ellos.