Por orden del Pentágono, armas destinadas a diferentes grupos fueron lanzadas en paracaídas en la región siria de Marea. Washington espera que esos grupos ayuden el Pentágono a expulsar el Emirato Islámico de la provincia siria de Raqqa.

Los grupos armados que reciben esa ayuda militar estadounidense, en violación del derecho internacional, son indistintamente
 afiliados al YPG kurdo,
 turcomanos bajo las órdenes de militares turcos
 y árabes ex miembros del llamado Ejército Árabe Sirio, dirigido este último por militares franceses.

Los dos últimos grupos lucharon anteriormente contra la República Árabe Siria junto al Frente al-Nusra (al-Qaeda) y Ahrar al-Sham, dos organizaciones yihadistas responsables de crímenes contra la humanidad.