Arabia Saudita, Bahréin, Egipto y los Emiratos Árabes Unidos anunciaron la ruptura inmediata de sus relaciones diplomáticas con Qatar, este lunes 5 de junio de 2017. La Fuerza Común Árabe, que opera contra Yemen, también anunció que Qatar queda excluido de sus filas.

Arabia Saudita, Bahréin y los Emiratos Árabes han prohibido todo contacto o enlace con Qatar –por vía terrestre, marítima o aérea–, lo cual hace inutiliza casi por completo el nodo aéreo de Doha.

Arabia Saudita, Bahréin, Egipto y los Emiratos Árabes Unidos comunicaron a los diplomáticos qataríes que tienen un plazo de 48 horas para salir de esos 4 países.

Esta es la más grave crisis diplomática que se registra en el mundo musulmán en los últimos 40 años.

Las relaciones de Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos con Qatar habían venido haciéndose cada día más tensas desde la cumbre arabo-islamo-estadounidense, celebrada en Riad.

Al término de esa cumbre, la agencia de prensa qatarí publicó un despacho que atribuía al emir Tamin, actual gobernante de Qatar, declaraciones favorables a Irán y afirmaciones según las cuales su familia –los Al-Thani– es descendiente de Abdelwahhab, el fundador del wahabismo.

Arabia Saudita reaccionó de inmediato y muy duramente, a través de todos sus canales de televisión, hasta que Qatar anunció que el sitio web de su agencia de prensa había sido víctima de una intrusión de hackers y que el despacho en cuestión había sido anulado.

Como prueba de su buena fe, Qatar ha solicitado ayuda al FBI estadounidense para aclarar el incidente.

En realidad, ese incidente sólo es la parte visible del iceberg ya que Qatar está participando –junto al Reino Unido– en un intento de redistribución de las fichas en el Medio Oriente, que podría modificar profundamente todas las alianzas actuales.

Vea este martes en nuestro sitio web «Enfrentamiento en Bilderberg 2017», por Thierry Meyssan (artículo actualmente en proceso de traducción).