Albert Rivera, que se ha convertido en el niño bonito, obediente y leal.

España pasa por un proceso político muy interesante, el cambio generacional en el gobierno es inevitable y esperemos que el modelo del Estado de Bienestar, que tanto sacrificio costó en la vuelta a la democracia y que obtuvo reconocimiento a nivel mundial, no desaparezca para custodiar las alforjas de los más poderosos.

Para el próximo proceso electoral, los grupos de poder, deberán confrontar a los líderes de la izquierda: Pedro Sánchez, Pablo Iglesias y Alberto Garzón, y no lo quieren hacer con Mariano Rajoy, sino combatirlos con sus propias armas: juventud, inteligencia y belleza.

Hace poco coincidí con Albert Rivera líder del partido Ciudadanos, en un evento político-empresarial privado en el Antiguo Casino de Madrid. Ya había oído sobre el apoyo que estaba recibiendo Albert de un famoso ex presidente de gobierno ibérico. Rivera saltó a la fama por su peculiar desnudo de insinuantes perfiles aunque las españolas los prefieren más fuertes, bronceados y más vello en pecho. Albert cuenta con 37 años, tiene carita de adolescente y hoy es el personaje principal de Ciudadanos, aunque la mayoría dice que dicho movimiento es el reciclaje del PP (Partido Popular), para ganar a los votantes entre 18 y 45 años.

Pero ¿dónde está lo raro de ir a comer con un presidente latinoamericano y sus auspiciadores empresariales y qué hay de extraño en dar una conferencia en una graduación de un foro de derechas?, la respuesta es simple, hay un nuevo delfín en el reino.

Han querido etiquetar a Sánchez como ¨el hombre guapo y atractivo¨ de la política española que goza de las simpatías de la prensa, pero quien en realidad tiene muchos privilegios en la radio, periódicos y televisión y con la élite de poder es Albert Rivera, que se ha convertido en el niño bonito, obediente y leal.

Quien sigue ganando con kilómetros de ventaja es Pedro Sánchez, Pablo Iglesias tiene un don de oratoria muy fuerte y su atractivo místico lo acentúa con su cabello largo, pero últimamente ha perdido aquel estilo que conquistó a las masas, ya no es tan irreverente es la guapa Irene Montero, quien está destacando y sacando cara por Podemos, ya que sin pelos en la lengua ha enumerado los casos de corrupción que manchan el actual gobierno del PP, pero sin duda, es Albert Rivera quién más se esfuerza en ganar el gran trono.