Las autoridades rusas desclasificaron una serie de datos que echan por tierra las conclusiones de la comisión investigadora internacional, encabezada por los Países Bajos, sobre la catástrofe del vuelo MH17.

Desde el derribo, el 17 de julio de 2014, de un avión de pasajeros de la Malaysia Airlines que cubría la línea Ámsterdam-Kuala Lumpur sobrevolando la región de Donetsk –incidente que costó la vida a 298 personas– Ucrania atribuye la responsabilidad de la tragedia a los independentistas que controlan esa región, acusándolos de haber abatido el aparato con un misil antiaéreo Buk, supuestamente proporcionado por Rusia.

Rusia, sin embargo, estima que el vuelo MH17 no fue abatido por un misil antiaéreo sino por la aviación ucraniana.

Ya en 2014, Moscú planteaba una decena de interrogantes que Kiev prefería ignorar [1].

El Consejo de Seguridad de la ONU adopta entonces la resolución 2166, que estipula la realización de una «investigación internacional exhaustiva, minuciosa e independiente» [2].

En la comisión internacional creada en el marco de esa resolución, figuran –además de Ucrania– los Países Bajos, a la cabeza de la comisión, Alemania, Australia, Estados Unidos, Francia, Malasia, Reino Unido y Rusia. Pero Rusia es rápidamente excluida de la comisión ya que las potencias occidentales dicen sospechar que en realidad es Rusia el agresor.

El hecho es que la hostilidad occidental no favorece la búsqueda de la verdad. Estados Unidos incluso se plantea hacer que la Corte Penal Internacional juzgue al presidente ruso Vladimir Putin como responsable de la tragedia y el sitio web estadounidense Bellingcat (vinculado al Atlantic Council) proveerá ciertos “indicios” a la comisión encabezada por los Países Bajos.

El 7 de octubre de 2014, Frans Timmermans, quien era ministro de Exteriores de los Países Bajos en el momento de la catástrofe y es ahora primer vicepresidente de la Comisión Europea, revelaba que uno de los pasajeros del avión derribado había tenido tiempo de alcanzar su máscara de oxígeno, lo cual contradice la hipótesis del misil antiaéreo [3].

El 8 de octubre, el BND (Bundesnachrichtendienst, o sea los servicios secretos de Alemania) comparecía a puertas cerradas ante la comisión del parlamento alemán a cargo de los temas de inteligencia. Según el semanario alemán Der Spiegel, el BND planteaba sobre el vuelo MH17 que:

  1. las fotografías presentadas por el gobierno ucraniano son falsas;
  2. las afirmaciones rusas de que el MH17 fue derribado por Ucrania y que aviones de guerra ucranianos se habían acercado al avión de pasajeros también eran falsas [4].

Según un minucioso estudio del profesor Ivan A. Andrievski, primer vicepresidente de la Unión de Ingenieros de Rusia, el avión de la Malaysian Airlines fue ametrallado en vuelo [5].

Posteriormente, el diario ruso Komsomolskaya Pravda publicaba el testimonio de un oficial ucraniano, quien revelaba que el MH17 había sido derribado por la aviación ucraniana [6].

El 22 de marzo de 2016, el diputado holandés Pieter Omtzigt (cristianodemócrata) anunciaba en Twitter que la comisión investigadora del parlamento de los Países Bajos había terminado sus audiencias a puertas cerradas y que, según las conclusiones de esa comisión, sólo Ucrania pudo haber derribado el avión porque sólo la parte ucraniana tenía desplegado en el lugar de los hechos el tipo de misil antiaéreo que –según los propios ucranianos– derribó el aparato [7].

El 24 de mayo de 2018, la comisión investigadora internacional –sin participación de Rusia y encabezada por los Países Bajos– presenta su trabajo en una conferencia de prensa organizada en Ámsterdam y afirma que el avión de la Malaysia Airlines fue destruido por un misil tierra-aire Buk perteneciente a la 53ª brigada rusa de defensa antiaérea, con base en Kursk. Los Países Bajos y Australia comunican a Rusia esas conclusiones [8], conclusiones que Rusia rechaza presentando una lista de anomalías comprobadas en el trabajo de esa comisión [9].

El 17 de septiembre de 2018, basándose en las fotos presentadas por la comisión internacional, fotos que le han permitido conocer el número identificativo del misil incriminado en el derribo del avión de pasajeros, Rusia demuestra que ese misil de fabricación soviética nunca estuvo en manos de Rusia y que en el momento de los hechos estaba en manos de fuerzas militares ucranianas desplegadas en Lvov. Rusia ha enviado a los Países Bajos todos los elementos que así lo demuestran.

[1«Vuelo MH17, las 10 preguntas de Moscú a Kiev», Red Voltaire, 21 de julio de 2014.

[2«Resolución 2166 sobre el vuelo MH17 Malaysia Airlines y debates», Red Voltaire, 21 de julio de 2014.

[3«Vuelo MH17: ministro de Exteriores de Holanda desmintió al BND alemán», Red Voltaire, 22 de octubre de 2014.

[5«Análisis de las causas de la catástrofe del vuelo MH17», por Ivan A. Andrievski, Оdnako (Rusia), Red Voltaire, 16 de noviembre de 2014.

[6«Vuelo MH17: Testigo revela la identidad del piloto que derribó el avión de pasajeros», por Dmitry Steshin, Nicholas Varsegov y Vladimir Sungorkin, Komsomolskaya Pravda (Rusia), Red Voltaire, 27 de diciembre de 2015.

[7Only Ukraine could bring down MH17”, Regnum (Rusia) , Voltaire Network, 21 de marzo de 2016.

[8«Carta de Australia y los Países Bajos a Rusia sobre el vuelo MH17», Red Voltaire, 25 de mayo de 2018.