El emir de Qatar, Tamim ben Hamad Al-Thani, ha regalado el avión privado más grande del mundo al presidente turco Recep Tayyip Erdogan.

Se trata de un Boeing 747-8i súper moderno y súper equipado con un costo aproximado de 500 millones de dólares.

Hasta ahora no se sabe si Qatar donó el aparato a la presidencia de Turquía o si es un regalo privado para el sultán Erdogan. Tampoco se sabe a cambio de qué el emir de Qatar otorga a Erdogan un presente de tal envergadura.

El avión en cuestión, concebido para una tripulación de 18 personas y sólo 76 pasajeros, formará parte de los numerosos medios de transporte a la disposición del presidente turco, que incluyen una impresionante cantidad de automóviles de lujo.

El Palacio Blanco, la residencia presidencial turca construida expresamente para Erdogan, se extiende sobre una extensión de terreno 4 veces mayor que el palacio francés de Versalles y fue pagado con dinero de los contribuyentes turco. Pero Qatar corre enteramente con el costo del nuevo avión presidencial, incluido el trabajo de pintar sobre el aparato el emblema nacional de Turquía, actualmente en proceso.

Junto al emir Tamim de Qatar, el presidente turco Erdogan se ha convertido en protector mundial de la Hermandad Musulmana, de donde proceden los dirigentes de los grupos yihadistas que operan a través del planeta.