El Ejército Árabe Sirio, con apoyo aéreo ruso, ha iniciado una importante operación para liberar la ‎gobernación de Idlib, en el norte de Siria. Esta gobernación aún se hallaba bajo control de ‎diversas bandas yihadistas reunidas alrededor del grupo terrorista Hayat Tahrir al-Cham, afiliado a al-Qaeda. ‎

En virtud de un acuerdo concluido en Sochi, en septiembre de 2018, Turquía se había ‎comprometido a lograr que esos grupos entregaran su armamento pesado. ‎

Turquía no respetó esa parte del acuerdo y el final del verano es el periodo más propicio para iniciar ‎una ofensiva –las temperaturas ya no son excesivamente elevadas y las lluvias otoñales todavía ‎no han convertido esa región agrícola en un lodazal que dificultaría el uso de blindados. ‎

Los yihadistas han perdido posiciones avanzadas que ocupaban en la gobernación de Hama y se ‎han visto obligados a retroceder considerablemente. La estrategia del Ejército Árabe Sirio, ‎consistente en cortar las vías que permitían a los yihadistas recibir refuerzos, ya ha permitido la ‎liberación de la autopista que conecta la capital siria, Damasco, con la importante ciudad de ‎Alepo. ‎

Las tropas del Ejército Árabe Sirio ya han liberado Khan Cheikhun, la principal ciudad de la ‎gobernación de Idlib. A pesar de ser la capital administrativa de la gobernación que lleva ‎su nombre, la ciudad de Idlib es menos importante que Khan Cheikhun en términos de población y ‎extensión. ‎

Turquía envió a los yihadistas una columna de camiones y blindados con armas y ‎municiones. La vanguardia de ese convoy, que se componía únicamente de ‎yihadistas, fue bombardeada por la aviación rusa y Turquía ha advertido a Moscú sobre una ‎supuesta violación del acuerdo de Sochi, acuerdo que la propia Turquía no respetó en el ‎terreno. ‎

Aunque ya no pretende seguir apoyando la ocupación de Idlib, Turquía parece querer preservar las ‎vidas de sus aliados yihadistas, una sutileza difícil de concretar en el campo de batalla. ‎Por el momento, Turquía se ha abstenido de participar en los combates. ‎

Por su parte, Francia y Alemania, países que durante un año abastecieron con armas y alimentos a los yihadistas de Idlib, tampoco parecen estar participando en los combates mientras que el Ejército ‎Árabe Sirio continúa su avance en esa gobernación. ‎