En cierta prensa de los Estados Unidos hay que leer las cosas importantes en letra bien chiquitica, como en los contratos tramposos que hacen los abogados para las grandes compañías en los cuales los atractivos ofrecimientos que se hacen para atraer clientes en la propaganda, son prácticamente anulados con las cláusulas que vienen al final en caracteres imperceptibles a la vista humana.

Uno de esos periódicos que hay que leer siempre bajo la sospecha de la trampa es el diario The Miami Herald, ya sea lo mismo en su versión en español como en la del inglés. Las noticias manipuladas, las que la empresa quiere embutir como si fueran chorizos en la mente de sus lectores, por supuesto van bien destacadas en los titulares de la primera plana. Como es, pongamos por caso, en el Nuevo Herald de hoy en la mañana donde se destacan dos informaciones procedentes de Venezuela. En la primera se dice arriba, en titulo principal": Nueva rebelión contra Chávez". Y a continuación con fotografía y detalles se relata la última asonada golpista que se acaba de producir en Caracas por un grupo de oficiales de las Fuerzas Armadas de ese país que no quieren respetar la ley del orden de la democracia que está obligados a acatar y defender.

En la segunda información también de primera plana dice El Nuevo Herald, empatando una noticia con la otra: "Ni el petróleo logra salvar a Venezuela de la crisis".

Está mas que claro que Chávez están en la mirilla de El Herald y que solo un perfecto ignorante no es capaz de comprender que ese diario es el vocero de los que pretenden subvertir el orden constitucional en ese país para sacar a su Presidente del palacio de Miraflores a como de lugar.

Ahora vamos a la letra chiquita. En la página 5A del Miami Herald en inglés, casi como escondido, aparece un cable de la Prensa Asociada fechado en Jacksonville donde se reproducen unas declaraciones del ex presidente Bush, el padre del actual mandatario norteamericano donde este dice que "el conflicto con Irak no es inevitable y que su hijo claramente no quiere la guerra". Mas adelante el ex presidente señala que el otro Bush, el que está en la Casa Blanca solo quiere que Saddam Hussein cumpla con los acuerdos y resoluciones de las Naciones Unidas".

Las declaraciones del ex mandatario norteamericano George Bush, por ser el padre del actual Presidente, por haber sido él, el que iniciara el enfrentamiento con Hussein cuando desatara la llamada "Guerra del golfo", por haber sido además Presidente de los Estados Unidos, merecía que unas declaraciones suyas tan importantes, porque sirven para iniciar quizás - si los hijos tuvieran el buen juicio de escuchar a sus mayores - bien que merecía repito, ser destacadas en sitio mas prominente que en una pagina interior de El Miami Herald. Es como si no se quisiera que el lector se percatara de que esas manifestaciones moderadas del padre del actual Presidente Bush contrastan bien a las claras con la guerrerista retórica que se venía utilizando desde la Casa Blanca y que por supuesto, no tenía eco ni respaldo en ninguna parte del Mundo con la excepción de la Inglaterra de Tony Blair, el inglesito tránsfuga que al parecer tenía el empeño de quedarse con parte de botín petrolero en poder de Saddam Hussein.

Por supuesto que no toda la prensa de Estados Unidos es tan tramposa como el Miami Herald. Pero vivimos en Miami y a los miamenses les ha tocado vivir en una ciudad donde todo está bajo sospecha. Las elecciones están bajo sospecha, donde la radio y la televisión, sobre todo en español- con contadas excepciones— no cumple con las reglas más elementales de la imparcialidad periodística y donde el que dice la verdad es puesto en la picota pública acusado de "comunista traidor".

La etiqueta ya la hemos sufrido. También las bombas. Son medallas de honor para quien como nosotros escribimos lo que pensamos en letra grande, en mayúscula, para que todo el mundo nos escuche y lea sin la trampa de la letra chiquita.