El favoritismo inocultable, descarado, inmoral que muestra la Dirección General de Aeronáutica Civil, DGAC, con LanPerú (en realidad Lan Chile), ocasionó la protesta masiva del personal de Aerocontinente. Hasta las 1.30 pm. del jueves, el viceministro de Transportes, el inamovible Richard Díaz, no tenía idea de qué estaba pasando como lo dijo por un canal de cable. ¿Será por no saber, que los ministros de su sector caen como trebejos y él sigue firme e intocable?

LanPerú, con pilotos chilenos, vuela por nuestros aires como Pedro por su casa. Hace dos años en Dignidad, denunciamos que la empresa que era apadrinada por Raúl Diez Canseco gozaba de ciertas preferencias inaceptables para la propia seguridad nacional porque habíamos tomado conocimiento de un informe de la FAP que revelaba que pilotos militares chilenos volaban dichas naves. Nadie hizo caso.

En junio del 2002, Aerocontinente era cerrada en Santiago de Chile. Y en Perú, el izquierdista caviar Niño Diego García Sayán, entonces canciller, no tuvo mejor idea que condecorar a la ministra de RREE del país del sur, en su visita a Lima. Por sindéresis mínima hay ciertas aristas de amor propio que no se pueden traspasar. En el 2003 se pulverizó finalmente a Aerocontinente.

¿Por causa de qué protestan los trabajadores, si hay un reclamo interpuesto ante el MTC? ¡Por una razón muy simple: el pronóstico está anunciado! ¡Ya se sabe que los intereses poderosísimos y económicos que pagan a malas autoridades confirmarán que LanPerú siga volando por nuestros cielos como si no hubiera pasado nada!

Podría ser alguna otra aerolínea, pero en este caso, es LanChile con su mascarón de proa, LanPerú. Y el tema va más allá de patrioterismos o antis de cualquier especie. Mañosamente se favorece a esta empresa a pesar que el Perú ya entendió que el tema de cielos abiertos fue una impostura y una majadería comercial de gobernantes inmorales.

El director de la DGAC, Wilson Benzaquén, un conocido inepto para cualquier cosa, fue colocado en ese cargo por presión de Raúl Diez Canseco, con quien había sido diputado en el régimen de Fernando Belaunde. Sus metidas de pata e incompetencia sublimes dan que hablar y reír en todas partes. En este particular tema, sólo acata indicaciones y para nadie es un secreto que ya puede subir una escalera y hablar por celular hasta por cinco minutos seguidos. Luego de eso, tiene problemas de surmenage agudo.

El Perú está noticiado. No sólo permitimos que fuera aniquilada Aerocontinente en Chile por tener mejores precios y un buen servicio. Hasta las cuentas corrientes le fueron cerradas. También hay pirañas dispuestas a hacer lo mismo ¡nada menos que en Perú! ¡A esos hay que sacarlos a patada limpia y enseñarles a ser decentes, dentro de la ley y en el marco de un país que tiene que aprender a respetar a sus valores genuinos!

¡Ataquemos al poder; el gobierno lo tiene cualquiera!

Hay que romper el pacto infame y tácito de hablar a media voz.