En primer lugar mis saludos muy cordiales. Por intermedio de la presente les solicito formalmente iniciar una investigación sobre el proceder de la prensa en Cajamarca. En vista que en varias oportunidades (2001 y 2004) he presentado quejas ante la Federación de Periodistas del Perú-Centro Federado Cajamarca (No. Reg. FPP: 6898) sobre la ética profesional de algunos y sin tener una respuesta alguna hoy día me dirijo a ustedes.

Aquí opera la mina de oro más grande del mundo (Newmont Mining Cooperation), en Cajamarca la conocen con el nombre de Empresa Minera Yanacocha S.A., (con capital peruano de Minas Buenaventura S.A. en manos de Alberto Benavides de la Quintana ) y es que esta empresa transnacional nos deja en Cajamarca dos males: la contaminación permanente y la corrupción rampante. Es por este motivo que la prensa local, me refiero a los diarios El Clarín, Panorama Cajamarquino, a los radios RPP-Cajamarca, radios Moderna, Cajamarca, Caribeño, Ollantay y la TV-Local TV-Norte,TNP y Red Global entre otros, reciben publirreportajes bajo el suculento lema de Yanacocha : "Te apoyo, pero no me muerdas la mano".

Tan es así que los opositores honestos a tal situación y que luchan contra la contaminación y la corrupción son una presa muy fácil de campañas sicosociales de injuria, difamación y calumnia. Es más, ningún poder judicial -que sigue tan corrupto como antes- se ha pronunciado a favor de la ética profesional periodística. Siempre gana la Mina- como la conocen comúnmente en Cajamarca -sin el más mínimo rubor en la cara y despreciando la vida humana. Un caso emblemático es el del derrame de mercurio en el pueblo de Choropampa (ocurrido el 2 de junio del 2000) y donde fueron sentenciados como únicos responsables -¡que ironía de la vida!- el chofer del camión, el señor Esteban Blas y el alcalde del pueblo -por haberse atrevido protestar contra los abusos mineros- Lot Saavedra.

Además tampoco la prensa nacional (revista Caretas, el diario La República, entre otros) informan correctamente y como debe ser sobre estos temas, porque también son beneficiarios de los exhorbitantes contratos de publicidad de Yanacocha. Yo diría, que hoy día en Cajamarca, prácticamente el 90% de la prensa local -peor que en la época de Fujimori/Montesinos- está en manos de Yanacocha, está comprada, está de rodillas y está tan corrupta como otras instituciones del Estado y lastimosamente ni los sindicatos difunden con objetividad los valores éticos de un periodismo serio, imparcial y plural, naturalmente sin que esto signifique claudicar en lo que se lo puede denominar a futuro la verdadera razón de un periodismo del siglo 21: informar, opinar y analizar los hechos con honestidad y probidad.

Por lo tanto les ruego venir a Cajamarca a investigar con profundidad muchos hechos lamentables (algunos documentados ) y por el bien del periodismo ojalá consigo que en algo se mejore la relación pueblo-periodistas.

¡Ataquemos al poder; el gobierno lo tiene cualquiera!

Hay que romper el pacto infame y tácito de hablar a media voz.