El canciller venezolano Jesús Pérez
Foto OAS / Ribeiro

La situación política venezolana figura en la agenda de la Asamblea de la OEA, ¿Cuál es la posición de su gobierno?

Es muy importante lo que ha sucedido en Venezuela después de contratiempos que hemos tenido para que la oposición aceptara la Constitución, y finalmente la aceptaron, y decidieron jugar las reglas del juego. Nosotros siempre habíamos dicho todo es posible dentro de la Constitución, nada es posible fuera de la Constitución. La recolección de firmas para poder convocar al referendo revocatorio del Presidente se cumplió, el consejo nacional electoral hizo un trabajo muy interesante a pesar de una serie de presiones internas de una oposición política que lo quería descalificar, y al mismo tiempo presiones externas, como por ejemplo la ingerencia de Estados Unidos de siempre decir que ellos aceptarían lo que dijera la OEA y el Centro Carter, sin decir nada de que la autoridad única que podría decir sí, el revocatorio va, era el Consejo Nacional Electoral (CNE). Eso sucedió, tenemos un CNE reforzado, los venezolanos muy contentos porque fue la democracia la que ganó, porque el golpe militar del 12 de abril del año 2002 lo primero que hizo fue eliminar la Constitución, y en ese golpe militar estaba toda la oposición política. Pensar ahora que la oposición política aceptó la figura del revocatorio, nos parece que es un triunfo para la democracia y para todos los venezolanos, y ahora tenemos que prepararnos, y el Presidente mismo lo declaró, prepararse porque él, es el que va a comandar esta campaña para no haya revocatorio.

No es la primera vez que la OEA interviene en los asuntos de Venezuela, ¿atrás de esta intervención está la mano de Estados Unidos?

Nosotros pensamos que todavía no hemos logrado el equilibrio necesario para que un foro tan importante como es la OEA pueda determinarse independientemente, que no hayan voces que dicten el comportamiento, no solamente en el caso venezolano sino simplemente en el caso de Haití, en donde no hemos tenido un posición clara, sin ambigüedades, de la OEA. Pero yo creo que lecciones como de Venezuela deben servir para que este foro tenga un aprendizaje, porque no debemos tener una Organización que tenga dos pesos, dos medidas. Si tenemos que aplicar la Carta Democrática Interamericana, tenemos que aplicarla a todos los países, y en el caso de Haití nosotros debemos hacerlo.

Uno de los temas que se discute aquí es el de la corrupción, ¿cuál es la posición de su gobierno?

Una de las cosas que hemos denunciado desde que llegamos al gobierno es la corrupción que era una práctica cotidiana. Desde hace cinco años hemos estado actuado a nivel de la estructura del Estado para que eso no suceda, y hemos tomado decisiones importantes a nivel del Ejecutivo, pero al mismo tiempo hemos creado el poder moral que funciona con instancias como la Contraloría General, la Defensoría y la Fiscalía. Se ha estado trabajando, hemos ratificado decisiones internacionales para que esto pueda resolverse, pero yo creo que la misma Constitución se cura en salud, y contempla la revocatoria de los cargos de elección popular, por ejemplo para el caso de un diputado, un concejal, un alcalde o un presidente que esté acusado de corrupción, por una parte tenemos el poder de la Contraloría, la Fiscalía, tenemos las leyes, pero al mismo tiempo tenemos la voz del soberano.

¿Esto es inédito en las Constituciones latinoamericanas?

Inédito en Latinoamérica y en el mundo, porque eso va a contribuir mucho a la disminución de uno de los flagelos más grandes que está haciendo daño a nuestras democracias. La corrupción es una de las enfermedades más graves que sufren las democracias en América Latina.

Las fuerzas que apoyan al Presidente están planteando un referendo revocatorio de los diputados, ¿ cuál es el fundamento de esto?

La oposición está utilizando esa figura para provocar un referendo revocatorio del mandato del Presidente de la República, nosotros aprovechamos también de esa figura para aplicarla a unos 13 diputados, de los cuales hay 9 que van a tener que enfrentarse al referendo revocatorio de su mandato. Eso también hay que decirlo, entonces las bondades de esa Constitución nos permiten seguir avanzando en lo que nosotros llamamos la democracia participativa, porque el problema nuestro es que las personas que eran elegidas para un mandato popular de 5 años estaban amparadas por ese mandato y nadie podía decir nada, y si un diputado era un tremendo corrupto y no se le probaba, el pueblo tenía que aguantar a ese diputado.

En estos días hemos visto un gran remitido en la prensa ecuatoriana, firmado por una Asociación Mundial de Periódicos y ordenado por Carlos Bardasano de la Organización Cisneros de Caracas, en el que se «condena las políticas sistemáticas asumidas por el Estado venezolano contra la libertad de expresión y de prensa», ¿qué opina al respecto?

Este es un bloque de prensa que está dominado por una de las mayores fortunas que es la familia Cisneros, que ha invertido mucho dinero en los medios de comunicación, como en la televisión. Entonces ellos inventan fundaciones y organismos internacionales de prensa, ellos están haciendo las veces de los partidos políticos. Nosotros les decimos que se quiten esa máscara y creen un partido político y vayan a hablar ante el pueblo venezolano y le propongan, pero ellos no, ellos están detrás de ese tipo de anuncios que son una mentira, porque yo le aseguro que la función que los periodistas tienen que cumplir se está cumpliendo en Venezuela, simplemente lo que estamos haciendo es poniendo un poco de orden, porque algunos periodistas y algunos medios son partidos políticos y desinforman, y fueron ellos los que participaron activamente en el golpe de Estado hace dos años, y están ahí, no se les ha cerrado las puertas, pero nosotros hacemos un llamado al pueblo venezolano que los reconozca, esa prensa casi nadie la compra, es una prensa minoritaria. Estamos impulsando una Ley de Responsabilidad Social de los medios de comunicación, para que tengan una serie de limitaciones no de la libertad de expresión, sino de la forma para que no tengan libertad de hacer declaraciones mentirosas, porque en una democracia es necesario también que los medios de comunicación tengan una responsabilidad social.

Lo que se difunde en la gran prensa son los temas ligados al referendo o las movilizaciones, pero no dan a conocer los logros del proceso revolucionario de Venezuela, ¿cuáles son éstos?

Podríamos hablar de los logros que están reconocidos por los organismos internacionales. Con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) tuvimos una reunión y él reconoce que estamos cumpliendo las metas del milenio en cuanto a alfabetización, agua potable y asistencia médica, estamos trabajando mucho para la mayor parte de la población. Esos ya son logros que hemos tenido en estos años, a pesar de la serie de dificultades que hemos tenido por el saboteo económico y el golpe de Estado, nosotros estamos mostrando a nivel internacional que nos sitúa como uno de los países más avanzados en cuanto a las metas del milenio.

¿La situación económica está mejorando por la coyuntura favorable del precio del petróleo?

Eso forma parte de uno de los logros de nuestro país, es decir cómo lograr que tenga ingresos petroleros justos, no se trata de decir que son caros, simplemente justos, la energía hay que pagarla a justo precio, ese es el trabajo que ha hecho el Presidente Chávez en el marco de la OEA para que los precios sean justos, para un equilibrio de la economía con precios, en una banda que está entre los 23 y 28 dólares, que se ha mantenido, y que vamos a aumentarla y va a estar entre los 25 y los 30 dólares, que es lo que la economía puede manejar. Esto nos ha permitido tener ingresos adecuados e interesantes para poder aumentar los presupuestos de salud y educación, y al mismo tiempo, cumplir las misiones de carácter social que están dando oportunidades a los jóvenes y a la gente de escasos recursos.

Finalmente, un criterio sobre el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) y el planteamiento del Presidente Chávez de crear la Alternativa Bolivariana de las Américas (ALBA).

Al ALCA queremos darle el contenido del ALBA. Nosotros estamos por la integración latinoamericana, pero no una integración a cualquier precio, sin abandonar la soberanía y salvaguardando nuestros intereses, nuestras economías y la necesidad de que se fortalezcan, de que podamos intercambiar entre nuestras industrias, la pequeña y mediana industria entre los países de América. Nosotros pensamos que el ALCA es nefasto en la forma cómo se está planteando, que sería abrir los mercados, dejar una libertad completa al mercado para que éste ponga orden. Nosotros estamos impulsando el ALBA que sería la alternativa para las Américas para intercambiar mejor, y que frente a la inminencia de la integración de los mercados necesitamos la integración de los pueblos.