La refinería uruguaya de La Teja procesa aproximadamente 50 mil barriles de crudo por día. Es decir, es bastante modesta, pero sin embargo, su ubicación estratégica la hace atractiva para las grandes empresas petroleras, especialmente para las que tiene sus ojos puestos sobre el mercado suramericano.

Y, como actor destacado del negocio energético, Venezuela aun mantiene su interés en esa instalación, informaron fuentes que pidieron no se les identificaran
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La idea es llegar a acuerdos con los gobiernos de la región, para poder alcanzar sinergias entre activos petroleros tales como La Teja, en Uruguay, y la refinería de Pernambuco, en Brasil, dijeron.

La Teja ha sido codiciada por compañías tales como la española YPF-Repsol y la brasileña Petrobras. Su posición de dominio en el mercado interno de combustibles en Uruguay -lo que incluye una considerable red de estaciones de servicio-, su participación en este mismo sector en Argentina y su cercanía a los mercados del sur de Brasil, de Paraguay y de Bolivia, pueden explicar por sí solos el interés que despertó. Fue, sobretodo, entre los años 2001 y 2002, cuando durante un proceso de licitación nunca concretado, la Administradora Nacional de Combustibles, Alcoholes y Pórtland (Ancap)- llegó a buscar un socio que aportara capital, tecnología y suministro de materia prima.

En ese entonces Ancap tenía un plan de ampliación de sus instalaciones con miras a prepararse para competir en mercados cada vez más disputados.

Esta empresa estatal se dedica a la producción de petróleo, su refinación y comercialización gracias a una red de distribución de estaciones de servicio en Uruguay. Esta compañía abastece en total unas 600 estaciones de servicio en Uruguay y 340 en Argentina.
El mercado uruguayo de combustibles está regulado, pero en éste también participan empresas como la británica Shell, y las estadounidenses ExxonMobil y ChevronTexaco. Todas estas transnacionales son surtidas por Ancap.

La capacidad de producción de La Teja fue ampliada a 50 mil, hace unos 2 años, partiendo de una base de procesamiento de 38 mil b/d y tras una inversión de aproximadamente 120 millones de dólares.

Esta planta está situada en el barrio obrero de la Teja, los alrededores de Montevideo, al lado del Río de La Plata. La su vez posee una boya petrolera con un depósito de tanques instalada a unos 250 kilómetros de Montevideo, con un oleoducto que abastece a la refinería.
Su capacidad de almacenamiento suma entre tres y cuatro meses.
En el sur de la capital uruguaya se concentra 65% del mercado atendido por La Teja y al otro lado del Río de La Plata, en Argentina, está el restante 45%. Pero además, desde ese punto podría atenderse también a Paraguay, Bolivia y al centro-oeste de Brasil.