El jueves 5 de agosto de 2004, Nelson Chimbo, quien fue nombrado hace varias semanas secretario ejecutivo del Consejo de Desarrollo de las Nacionalidades y Pueblos del Ecuador (CODENPE) por el Presidente Lucio Gutiérrez, tomó posesión de su cargo. Chimbo aprovechó la presencia del Fiscal de la Nación, cuya presencia demandó para verificar supuestos robos y destrucción de las instalaciones del CODENPE, y procedió a posicionarse a la fuerza.

El representante del gobierno fue elegido ilegalmente despues de que el gobierno impuso el decreto 1833A que viola la Constitución y el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Nelson Chimbo no fue nominado por el Consejo de las nacionalidades y pueblos, instancia a la correspondía de acuerdo a la ley elegir a un nuevo secretario ejecutivo. Esta irregularidad desató un conflicto institucional, ya que los representantes de los pueblos y nacionalidades se tomaron la sede del CODENPE, impidiendo que el secretario ejecutivo tomara poseción del cargo.

De este modo, el gobierno de Gutiérrez impuso a su representante y viabilizó el ingreso de organizaciones gremiales y religiosas en las entidades institucionales y autónomas de gobierno de los pueblos y nacionalidades indígenas. Burla también los acuerdos establecidos con Carlos Vimos, presidente del Consejo Nacional del CODENPE, y varios funcionarios.

El Presidente Lucio Gutiérrez, quien ganó las elecciones con el respaldo del movimiento indígena y después traicionó su mandato, está empeñado ahora en profundizar la división de las organizaciones indígenas, en especial de la CONAIE, mediante políticas clientelares, soborno, corrupción de dirigentes y ex dirigentes, creación de organizaciones «fantasmas», e ingerencia de organismos vínculados a sectas religiosas y partidos políticos como la Federación Ecuatoriana de Indígenas Evangélicos (FEINE) y la Confederación Nacional de Organizaciones Campesinas Indígenas y Negros (FENOCIN).

La CONAIE y la ECUARUNARI condenan y rechazan esta actitud del gobierno. No apoyan ningún proceso de reestructuración del Consejo de Desarrollo de las Nacionalidades y Pueblos del Ecuador.

En días anteriores, las organizaciones indígenas hicieron un llamado público y realizaron una petición formal a la comunidad nacional e internacional a estar atentos a estos acontecimientos. Han actuado como mediadores la UNICEF, el PNUD, entre otros, y se estableció conversaciones preliminares con el ministro de gobierno, Raúl Baca, para lograr un acuerdo mediante el diálogo y solucionar este delicado conflicto.

ECUARUNARI y CONAIE responsabilizan «al gobierno neoliberal de Gutiérrez por las consecuencias que puede provocar la intención de enfrentar entre los sectores indígenas. Reiteramos nuestro llamado a la comunidad nacional e internacional a estar atentos de estos hechos violatorios de los derechos de los pueblos indígenas y a pronunciarse en contra de este atropello.»