El vacío que deja Yassir Arafat

¿Quién será el sucesor del indiscutido líder del Movimiento de Liberación de Palestina Yassir Arafat? ¿Un palestino «moderado» o un palestino radical?

Porque de eso depende mucho el futuro del Medio Oriente, una convulsa región del mundo donde árabes y judíos vienen enfrentándose por largos años de sangrienta lucha entre ellos, sin que la paz tan deseada por todos haya podido imponerse por encima de las diferencias que separan a ambos pueblos, paradójicamente procedentes de un mismo tronco racial unidos por cercanos lazos de sangre.

La paz entre palestinos y judíos puede que se aleja un tanto mas con la desaparición de Arafat.

Contrario a lo que muchos piensan, había mas posibilidades de lograr un acuerdo de paz entre el Estado de Israel y el naciente Estado Palestino con Arafat de líder y al frente de su pueblo que ahora, después de su muerte cuando el futuro se torna incierto porque nadie puede garantizar que sendero tomará el Movimiento de Liberación Palestino una vez desaparecido su fundador y guía moral a quien por encima de las naturales diferencias, todos los palestinos aceptaban sus dictados y su palabra como norma de absoluta fe y obediencia.

En política cada país, cada pueblo tiene su estilo y su idiosincrasia. Tratar de imponer los valores de una cultura sobre los valores de las culturas de otras naciones solo conduce al error. En las guerras coloniales y otras guerras imperiales del pasado Siglo XX, las naciones occidentales que trataron de imponer sus intereses económicos y culturales sobre otros pueblos, no encontraron al final del camino nada mas que derrotas. ¿Por qué triunfó Mao Tse Tung en China? Triunfó mas que por comunista, porque su movimiento era una causa muy autóctona de profundas raíces chinas.

En Viet-Nam la historia no fue diferente. Primero los franceses y después los norteamericanos no pudieron derrotar a lo vietnamitas. Ni los franceses en Dien Bien Fu ni los americanos en Saigón, con todo el poderío militar y adelantos tecnológicos de ambas potencias occidentales, no lograron vencer a los «tercermundistas» seguidores de Ho Chi Minh.

¿Por qué? Porque su movimiento, mas que comunista era la encarnación cabal de una revolución nacional de profundas raíces vietnamitas? Ahí está la respuesta.
Al final, después de tantas vueltas y revueltas Estados Unidos tuvo que llegar a una paz permanente con China. ¿Y lo hizo con quien? Con Mao Tse Tung, el líder indiscutido de la Revolución China, que era el más genuino representante de su pueblo.

Sabia fue la decisión del Presidente norteamericano Richard Nixon de firmar la paz con China en vida de Mao Tse Tung, porque nadie hubiera podido predecir entonces si su sucesor, cualquiera que este hubiere sido, tendría el respaldo popular y la autoridad moral de hablar como una sola voz en nombre de su pueblo, puesto que en su figura estaba encarnada la esencia de la revolución china de la cual había sido su conductor.

La muerte de Yassir Arafat deja un vacío y una oportunidad perdida para encontrar la paz con el mejor interlocutor posible del pueblo palestino. Porque él y nadie mas que él, Yassir Arafat, que ha sido el líder y fundador del Movimiento de Liberación Palestino, tenía la moral para hablar en nombre se la causa de su pueblo sin que nadie le pudiera discutir su absoluta autoridad.

Ha muerto Arafat. Se ha perdido una oportunidad. La de encontrar la paz entre árabes y judíos en vida de Yassir Arafat. Queda un vacío. ¡Ojalá que no sea la tumba de la paz en el Medio Oriente!