El vocero del Partido Comunista del Perú Patria Roja, Rolando Breña, calificó de aventurera la ocupación de la comisaría de la ciudad de Andahuaylas, en el sureste del país, por unos 150 miembros del llamado Movimiento Etnocacerista, el día 2 de enero.

Añadió que la falta de seriedad de la rebelión se nota en que esta se realiza sin apoyo, sin ninguna base social, sin una estrategia de carácter popular y, sobre todo, sin objetivos políticos claramente definidos.

Sólo es una aventura familiar que no tiene peso político alguno, dijo Breña en declaraciones al diario La República, al negar también la existencia de vínculos de su organización con la rebelión etnocacerista.

Breña aseguró que el detonante de la acción fue el pase a retiro el día 29 de diciembre pasado del teniente coronel Ollanta Humala, hermano del líder del etnocacerismo, el ex mayor Antauro Humala.

Una posición similar a esta última expresó esta mañana el secretario general colegiado del Partido Aprista, Mauricio Mulder, uno de los principales críticos del gobierno de Toledo.

El legislador Javier Diez Canseco, máxima figura del Partido Democrático Descentralista, consideró que la acción de Humala sólo favorece a los intentos de ex miembros del régimen del presidente Alberto Fujimori (1990-2000) para lograr la impunidad en los delitos que se les imputan.

El parlamentario Edgar Villanueva, del Partido Perú Ahora, quien se encuentra en las proximidades de Andahuaylas, condenó también el alzamiento de Humala y sus seguidores.

La situación en la convulsionada ciudad fue descrita de tensa calma en las últimas horas, mientras contingentes de la policía siguen llegando por vía aérea a la zona.

Un violento enfrentamiento esta madrugada entre la policía y los rebeldes dejó un saldo de cuatro agentes muertos y varios heridos, según los reportes de los hospitales de la ciudad.