OPCION acaba de cumplir cuatro años de vida, dentro del periodismo nacional. Parece muy poco, pero en el campo del periodismo escrito, en donde nacen y desaparecen periódicos y revistas, como cometas fulgurantes y pasajeros, es un suceso un tanto extraño y digno de celebrarse.
Mantener un periódico en nuestro país, en donde el poder económico y político acapara todos las posibilidades informativas e impone su política editorial de acuerdo al “billete” que maneja, es muy difícil sostener un periódico alternativo e independiente, sin financiamiento institucional de ninguna clase, sin nexos ni compromisos con el poder político y económico.
OPCIÓN nació el 2l de Enero de 2001 y en su primer Editorial manifestaba: “OPCION nace y se proyecta como el periódico del siglo veintiuno, en la búsqueda del renacer de la esperanza, de la aurora de la nueva sociedad, en la acción directa y frontal para superar las causas estructurales de la crisis, de la miseria económica y moral del Ecuador.- Como el manantial cristalino que nace en nuestros nevados, con el ímpetu de su torrente impregnado en el alma misma de nuestro pueblo, nace OPCION, para abrir el nuevo surco, el despertar de las conciencias, destruyendo viejos y nuevos diques, arrasando con los mitos de la “neutralidad”, de la “imparcialidad” que cobijan disimuladamente la prensa amarilla, los intereses y apetitos voraces de los distorsionadores de la realidad, cómplices perversos de la manipulación del poder y beneficiarios del statu quo”
En la página 3 del primer número, dedicada a los asuntos políticos, OPCIÓN, afirmaba: “El proyecto autonómico presentado a la opinión pública nacional, tiene como propósito central desintegrar nuestra Patria en 22 republiquitas de bolsillo, con el fin de satisfacer los intereses de los mismos círculos de poder que han hundido a la República en la más pavorosa crisis de la historia y han convertido al Ecuador en el Estado más corrupto del continente americano”. Han pasado cuatro años y seguimos en la misma situación: el miércoles 26 de enero de 2005, acaba de realizarse una marcha organizada por la oligarquía guayaquileña y encabezada por el partido Social Cristiano, los que, ante el peligro de perder la hegemonía política, económica y social que detentan desde hace 25 años de “democracia”, salen a las calles de Guayaquil, con la misma amenaza: autonomía; y ahí esta Jaime Nebot, el nuevo recadero de la oligarquía, ahogado de prepotencia y vanidad gritando desde la tarima: “Quieren asesinar a los que producimos la riqueza...para que nazca el totalitarismo”... “Un Guayaquil invencible y autónomo”... “Este es el primer aviso”.... “Guayaquil víctima de la injusticia, reclama su libertad”.
La oligarquía, nadando en corrupción, mira con terror que se acerca la hora de la justicia, porque sabe que el pueblo será implacable: sin las Cortes de Justicia en sus manos, sin la alcahuetería del Tribunal Constitucional, sin la trampa y el enjuague del Tribunal Supremo Electoral, ya no podrán valerse de los jueces corruptos ni de la “impunidad” parlamentaria, para armar sus mayorías y tapar sus atracos y sus crímenes. Si Pinochet, después de 35 años ha sido juzgado y sentenciado, por qué en el Ecuador no se puede castigar a los corruptos y condenar a los asesinos. Están esperando justicia los desaparecidos y los asesinados en el gobierno León Febres Cordero, jóvenes idealistas de “Alfaro Vive” y los Hermanos Restrepo. Está pendiente la condena contra los autores, cómplices y encubridores del asesinato de Jaime Hurtado y sus compañeros.
Como es natural, a OPCIÓN, en su actividad periodística, no le interesan los matrimonios, los baby showers, las reinas de belleza, los banquetes y besamanos palaciegos. Le interesa lo que sucede con la política, tan sucia y enrevesada; le interesa desenmascarar las verdaderas intenciones del imperio, cuando quiere imponernos el TLC e involucrarnos en los problemas armados de Colombia. Nos interesa hacer entender a nuestros lectores cuáles son las injusticias del sistema; quienes son los causantes de la crisis política y social que nos acosa; cuales son los verdaderos actores que danzan en el tinglado de la corrupción; las causas por las que abandonan el país, en caravanas permanentes y dolorosas, tantas mentes brillantes y tantas manos hábiles y vigorosas, que buscan un futuro mejor para sus familias.
Para cumplir estos objetivos, OPCION cuenta con un equipo de trabajo brillante, constituido, casi en su totalidad, por jóvenes graduados en la Facultad de Comunicación Social de la Universidad Central, así como con un cuerpo de colaboradores: sociólogos, escritores, poetas, economistas, juristas, que se encargan de analizar y profundizar en los más variados vericuetos de la realidad nacional.
Pero OPCION no solo es periodismo; es CULTURA, también. De sus doce páginas, cuatro las dedica a los problemas de la cultura nacional, con columnas de calidad y versación. Ha creado la Red de Periodismo juvenil, en la que participan estudiantes de varios colegios secundarios los que, además de los periódicos murales expuestos en sus respectivos colegios, tienen un suplemento mensual que circula incorporado a OPCION. Ha puesto en práctica un proyecto Editorial para publicar obras de arte y literatura que, por la discriminación del sistema, se quedan inéditas, frustrando la creatividad de artistas y escritores. Participa activamente en el movimiento cultural democrático y emancipador, liderado por la Unión de Artistas Populares del Ecuador (UNAPE), fruto de lo cual está presentándose en el país la Cantata en Homenaje al l5 de Noviembre de l922.
Cuatro Años de intensa actividad y ... ¡Seguimos adelante!.

Alfonso Murriagui