¿Qué clase de delito han cometido los bancos que decidieron lanzar la público los dólares que les habían sido rechazados en Estados Unidos al haberse detectado un lote de billetes falsificados con una serie determinada dentro de sus remesas previas a la semana santa?

Los mismos que nos entregaron los billetes bajo sospecha, en medio de la distracción generada por la agonía papal, han salido del arbitrario duelo no laborable decretado por el gobierno a decir que no recibirían de regreso lo que habían hecho circular en los dían anteriores.

Yo tengo uno de esos billetes prohibidos que me lo dieron en ventanilla del Banco Continental de Miraflores el sábado pasado. Y ese bendito (¿maldito?) papel verde representa en estos día el 20% de los ingresos que he podido obtener en un marzo especialmente duro, para afrontar obligaciones de pago muy superiores a esta cifra.

Y qué me hago si los bancos me han estafado. ¿Dónde están el BCR, la Superintendencia de Bancos y la Defensoría del Pueblo?

Si a mí me ha tocado verme afectado: ¿cuántas más personas comparten mi situación?, ¿cuántos que han realizado operaciones mayores de ventas o retiros de dinero para realizar pagos futuros deben tener los billetes que nuestros banqueros no pudieron meterle a los gringos y decidieron encajarle a los peruanos?

¿A qué virtud del mercado vamos a imputarle esta capacidad bancaria de mantener secreto sobre los problemas de ciertas monedas hasta que puedan deshacerse de ella?

Tengo además una aprehensión mucho más inquietante: el Perú ha sido el único país que decretó día no laborable en relación a la muerte de Juan Pablo II. Y no lo hizo el día que murió (sábado) o el de su entierro (viernes), sino el lunes, es decir en comienzo de semana, cuando nada especial ocurría en el Vaticano y nadie en el país se había preparado para suspender sus actividades.

Ha sido así que mientras el 99% de las noticias provenía de un Vaticano moviéndose en cámara lenta y alargando los pasos de la despedida del pontífice, aquí se “filtraba” la noticia de que habían dólares falsos. Y más tarde se decía que eran de una serie específica. Y finalmente el lunes feriado, con todos los bancos cerrados, se comunicaba que los bancos suspendían hasta nuevo aviso la validación de estas monedas.

Si Toledo se concertó con los bancos para la estafa es algo que debe investigarse.

Después de todo el hombre que hace el cínico papel de anunciarnos que si en nuestros ahorros dentro del banco tenemos los billetes premiados nos los vana a pagar, pero si los tenemos en la cartera y no cumplen requisitos que han no han sido precisados, nos jorobamos porque así es nuestra mala suerte es Ismael Benavides de ASBANC y del Interbank, otra de las joyitas del grupo ulloísta de los 80, posteriormente reagrupado en el Instituto Peruano de Economía IPE: Kuczynski, Abusada, Boloña, Dubois, Dañino, etc.

 Enfría la cosa hermano con esto del Papa, hagan un feriado y pasará más suave lo de los billetes falsos que los bancos trasladaron al público. Con eso no pierde la banca y la economía toledista sigue adelante.

 La banca nunca pierde, Ismael.

  ¡El colmo digo yo!