Encuentro Alternativo a la IX Ronda de Negociaciones del TLC con EE.UU. Bolivia-Colombia-Ecuador-Perú

Después de realizada la novena ronda del TLC Andino, el
panorama que ofrecen las negociaciones no puede ser más
lamentable. Estados Unidos llegó en su actitud arrogante de
siempre, imponiendo nuevas condiciones y exigencias. No aceptó
negociar en forma conjunta el tema de las barreras sanitarias y
fitosanitarias a las exportaciones andinas, consideró insuficientes
las concesiones hechas por los andinos en materia de propiedad
intelectual, exigió trato preferencial a los productos que exporta,
pidió que las reglas que rijan las relaciones de los andinos entre si
sean las del tratado y no las de la CAN. En síntesis, llegó con
fuertes exigencias y ninguna respuesta a los pedidos andinos.

De parte de los países andinos la situación es crítica. El equipo
ecuatoriano se deshace, ante la inestabilidad interna y la pérdida
completa de legitimidad de los negociadores.

La caída de Lucio Gutiérrez en ese país y la instauración del nuevo gobierno de
Alfredo Palacios, puede convertirse en una traba para los
propósitos estadounidenses si el movimiento popular continúa su
presión y el nuevo mandatario mantiene los reparos que venía
haciendo al tratado.

El presidente del Perú llamó a firmar rápidamente, nombró a un
representante de las multinacionales en su equipo negociador de
propiedad intelectual y a cambio recibió como agradecimiento
nuevas exigencias y condicionamientos. Colombia acudió al
argumento de que tiene una “complejidad distinta” para rogar
concesiones especiales.

La respuesta de Estados Unidos ha sido
y será contundente, exige el levantamiento inmediato de las
restricciones para sus exportaciones de carne, amenaza con
represalias que incluyen recortes al Plan Colombia, vital para la
supervivencia de la política de seguridad de Uribe.

Estos y otros aspectos muestran nuevamente la inflexible posición
estadounidense y la debilidad de los gobiernos andinos y
presagian con claridad la naturaleza del tratado que se aprestan a
firmar: Un tratado confeccionado según las imposiciones de
Estados Unidos, que arruinará a los países andinos, cerrándole
nuevamente a los serviles gobiernos, el más pequeño margen de
movimiento. Ante las dificultades del Cafta en el Congreso
norteamericano, es previsible que tengan que negociar cláusulas
aun mas duras que las de los países centroamericanos.

La
negociación volvió a mostrar su verdadera naturaleza: Se trata
simplemente de cumplir con una rutina formal, en la cual los
gobiernos de la región ratifican su propósito de aceptar la
recolonización y Estados Unidos entre más le entregan, más
exige. La verdadera faz del tratado es la profundización del modelo
neoliberal que ha profundizado la pobreza y la miseria en la región.

El TLC andino ha sido presentado como una propuesta para el
desarrollo de nuestros países y se acusa a los opositores de no
presentar formulaciones alternativas. Esta es otra mentira de los
círculos neoliberales. Sí tenemos propuestas, el eje de las cuales
es la conquista de la soberanía nacional, la ampliación y
fortalecimiento del mercado interno, el fomento a la industria, la
garantía de la soberanía alimentaria, reformas tributarias que
graven las altas tasas de ganancias de las grandes empresas que
gozan de exenciones privilegios, la promoción del bienestar de la
población, la renegociación de la deuda externa y sobre esta base
la búsqueda de las mas estrechas relaciones entre nuestros
pueblos y países unidos múltiples lazos comunes que el TLC
intenta destruir.

Pugnamos por que el necesario incremento de las
exportaciones contribuya al desarrollo de los países y no se
convierta en un favor para las multinacionales, un medio para pagar
la onerosa deuda externa y un mecanismo de sumisión y
dependencia. Proponemos una inserción en la economía mundial
como naciones dignas y soberanas que tienen una fuerte base en
su economía interna. Consideramos que nuestras naciones son
viables y tienen grandes potenciales de crecimiento, siempre y
cuando superen la dependencia, promuevan la vida digna de la
población y busquen un camino propio de desarrollo.

Consideramos que es necesario resguardar aquellos avances que
en la CAN y otras formas de relaciones internacionales que
signifiquen el fortalecimiento de la capacidad de dotar a nuestros
países de políticas autónomas de desarrollo con equidad. Al
mismo tiempo rechazamos la idea de que solo del comercio
internacional provendrá el crecimiento. Los pequeños grupos
oligárquicos de los países andinos, interesados en la firma del
tratado, en medio de contradicciones internas, forcejeos y
lloriqueos, no encuentran más alternativa que inmolarse en el altar
del “libre comercio”.

Sin embargo, la esperanza de un desenlace favorable, como
siempre radica en los pueblos. En los países andinos aumenta la
inconformidad popular a medida que nuevos sectores se dan
cuenta de la grave amenaza. Las movilizaciones se incrementan y
los que combaten el tratado apelan a la conciencia, organización y
respaldo de la población.

Aumentan los acercamientos entre los
pueblos y diversos sectores como los campesinos, obreros y
mujeres fortalecen sus niveles de coordinación regional que
contribuyen a la integración de los pueblos. Diversas iniciativas
exigen que no se suscriba el tratado sin una verdadera consulta
popular y con garantías a la oposición. Sectores que antes eran
indiferentes se pronuncian y el denominador común es ver el TLC
no como una oportunidad sino como una amenaza.

La debilidad y entreguismo de los gobiernos, la arrogancia de los
Estados Unidos, la creciente inconformidad popular, la conciencia
de que estamos nuestros gobiernos títeres están entregando
gratuitamente toda posibilidad de desarrollo soberano de nuestros
países, nos lleva a ratificar nuestra decisión de decir no al TLC
y a proponer la más amplia unidad en contra del mismo. Es el
momento de concentrar todas las fuerzas contra este tratado
recolonizador y aprovechar el hecho de que las criticas al mismo,
aun provenientes de sectores con los cuales tenemos diferencias,
se convierten en motivos y argumentos para que no se suscriba.

Acudiremos a la movilización popular, a las campañas educativas
y de información e invitamos a toda la ciudadanía a incorporarse a
esta lucha que en lo inmediato significa exigir a los gobiernos que
se levanten de la mesa, cesen las negociaciones y en todo caso
que no aprueben el tratado sin que se someta a la más amplia y
democrática consulta a la población.

Invitamos a los pueblos andinos a rechazar en las movilizaciones
del primero de mayo este nefasto tratado y que se organicen en
toda la región movilizaciones y todas las formas de protesta social
durante la próxima ronda que se realizará la segunda semana de
junio en Quito.

Plan de lucha

  1. Se acordó insistir en que la lucha contra el TLC exige a los
    movimientos sociales promover una amplia unidad que supere
    diferencias secundarias, permita incorporar nuevos sectores a la
    lucha y al mismo tiempo reforzar la labor educativa entre la
    población sobre los graves impactos que tendrá la firma del
    tratado.
  2. Se harán esfuerzos para que en las movilizaciones del primero
    de mayo la lucha contra el TLC ocupe un lugar central.
  3. Se organizarán acciones de propaganda, movilización y
    protesta paralelas a la realización de la próxima ronda de
    negociaciones prevista para la segunda semana de junio en Quito.
  4. Se promoverá para la ronda de Quito una declaración de
    parlamentarios en contra del TLC.
  5. Se acompañará la movilización de acciones legales en contra
    del TLC, utilizando los mecanismos legales existentes en cada
    país.
  6. Se estimularán los mecanismos regionales de coordinación
    sectorial, buscando que se fortalezcan los mecanismos sindicales,
    campesinos y de mujeres existentes y se creen otros entre nuevos
    sectores.
  7. Se mantendrá la independencia de los gobiernos y se buscará
    reforzar la solidaridad continental con la lucha andina.
  8. Se intensificará la relación con las organizaciones
    democráticas en Estados Unidos de tal forma que se organice la
    campaña ante el Congreso y la opinión pública en Estados Unidos
    en contra del tratado.
  9. Aprovechando que en varios países comienzan procesos
    electorales, se dará énfasis en la campaña contra el tratado al
    emplazamiento a las autoridades nacionales y regionales y a los
    partidos políticos para que definan una actitud clara contra el
    mismo.

El encuentro decidió expresar su solidaridad con las comunidades
indígenas del municipio de Toribio, departamento del Cauca en
Colombia, quienes realizaron hace pocas semanas una ejemplar
labor educativa y democrática en contra del TLC y que ahora son
víctimas del enfrentamiento armado que destruye la posibilidad de
la población de avanzar en la lucha contra el TLC.

Lima, 21 de abril del 2005

PERU: PERUANA FRENTE AL ALCA Y TLC: CONFEDERACION
GENERAL DE TRABAJADORES DEL PERU ((CGTP), CENTRAL
UNICA DE TRABAJADORES (CUT), CONFEDERACION
CAMPESINA DEL PERU (CCP), CONFEDERACION NACIONAL
AGRARIA (CNA), CONSEJO DE LA MEDIANA Y PEQUÑA
MICROEMPRESA DEL PERU (COMPYMEP).

COLOMBIA: RED COLOMBIANA FRENTE AL LIBRE COMERCIO
Y EL ALCA (RECALCA), SALVACION AGROPECUARIA,
CONSEJO REGIONAL IINDIGENA DEL CAUCA (CRIC),
ASOCIACION NACIONAL DE MUJERES CAMPESINAS,
NEGRAS E INDIGENAS DE COLOMBIA (ANMUCIC),
FEDERACION COLOMBIANA DE EDUCADORES (FECODE).

ECUADOR: CAMPAÑA ECUADOR DECIDE, CONFERACION
NACIONAL DE USUARIOS DEL SEGURO SOCIAL CAMPESINO
(CONFEUNASSC), CONFEDERACION DE NACIONALIDADES
INDIGENAS DE ECUADOR (CONAIE), ECUARUNARI,
FEDERACION NACIONAL DE ORGANIZACIONES CAMPESINAS
E INDIGENAS (FENOCIN)

BOLIVIA: MOVIMIENTO BOLIVIANO DE LUCHA CONTRA EL
ALCA Y EL TLC, CORDINADORA DE INTEGRACION DE
ORGANIZACIONES ECONOMICAS CAMPESINAS (CIOEC),
MOVIMIENTO SIN TIERRAS DE BOLIVIA (MST).

CLOC: CORDINADORA LATINOAMERICANA DE
ORGANIZACIONES DEL CAMPO