La candidatura del canciller Rafael Bielsa avanza impulsada por las encuestas. De no mediar situaciones que modifiquen, en los próximos meses, la situación política argentina, el ministro estará a la cabeza de la lista porteña del kirchnerismo, así como Cristina Fernández ocupará ese lugar relevante en la nómina bonaerense para los comicios del año en curso.

Este panorama abre interrogantes acerca del futuro jefe de la cartera de Relaciones Exteriores en nuestro país: uno de los nombres que emerge con mayores posibilidades de ocupar ese cargo es el ex gobernador mendocino y ex candidato presidencial José Octavio Bordón.

Según la información suministrada a este periodista por fuentes oficiales confiables, el nombre de quien obtuvo unos cuatro millones de votos en los comicios de 1995 y luego diluyó su presencia política nacional, fue impulsado por el ex vicepresidente de la Nación Carlos Chacho Alvarez y aceptado tanto por Bielsa como por el presidente de la Nación Néstor Kirchner.

Paralelamente, la información incluye la creciente incidencia del ex líder frepasista sobre algunas franjas del gobierno nacional. "Se considera, también, su inclusión en un cargo relevante" fue la expresión formal utilizada para señalar que la figura del Chacho es valorada en la Casa Rosada.

Las dudas existentes acerca de una eventual designación de Alvarez también se asientan en los sondeos, sólo que a diferencia de lo que ocurre con Bielsa, su estrella no brilla con intensidad ante la opinión pública. Por eso, las fuentes añadieron que "el presidente sabe que la irrupción del Chacho como funcionario puede generar resistencias".

La Unión Sudamericana

El éxito del hermano del renunciante entrenador de la Selección Nacional de Fútbol ante un sector de la ciudadanía está emparentado con su accionar al frente del Ministerio. Los votantes estarían evaluando positivamente la participación argentina en el Mercosur, así como una actitud ante el mundo que caracterizan como independiente.

En los ámbitos políticos, a nadie escapa que la presencia de Bordón en esa delicada zona oficial puede modificar la imagen construída desde el kirchnerismo. Actual embajador en los Estados Unidos, el mendocino es reconocido por sus vínculos con áreas importantes del poder norteño. No son pocos los que sitúan a Alvarez en un lineamiento semejante.

Frente a la perspectiva de modificaciones en la política exterior, las fuentes estimaron un dato a considerar las declaraciones de Bielsa en favor de un "Alca con principios"; a su través, se intenta suavizar el ingreso de Bordón y evitar que la población identifique su arribo al gobierno como un giro en la política latinoamericana argentina.

La apuesta, sin embargo, guarda movidas de cierta complejidad. "El gobierno no va a quebrar las relaciones con el Mercosur, pero quiere mejorar las relaciones con los Estados Unidos" apuntan los informantes, explicando que la Argentina puede llegar a tomar cierta distancia de la Venezuela bolivariana de Hugo Chávez pero no del resto de los países vecinos. Aún así, precisan, esa distancia no llegará a la agresión o el boicot que pretende el Departamento de Estado.

"Los acuerdos firmados (con Venezuela) se cumplirán" indicaron, para luego añadir que "el gobierno no quiere cargar con la imagen populista que caracteriza al liderazgo de Chávez, ese es un estilo que no le interesa a Kirchner porque piensa que puede traerle más problemas que beneficios".

La Unión Interior

Vale recordar que una apreciación semejante fue utilizada, públicamente, por el ministro de Economía, Roberto Lavagna, al referirse a la política salarial oficial. Lavagna tendría asegurada la continuidad en su cargo, al menos, hasta octubre próximo, cuando se efectúe una nueva negociación con el Fondo Monetario Internacional.

Cuando este periodista inquirió, hilvanando los temas precedentes, que una mejoría en las relaciones con los Estados Unidos era una derivación de la ratificación del modelo agroexportador asentado en bajos ingresos populares, se le respondió que "lo que se busca es un equilibrio, no se puede jugar a la independencia absoluta en un mundo interdependiente".

La indagatoria siguiente se refirió al desgaste que puede ocasionar en el conjunto de la imagen oficial ese aplastamiento salarial junto a los incrementos tarifarios y el deslizamiento de los precios de productos de consumo masivo. "La gente sabe que el gobierno no puede hacer más de lo que hace y confía en Kirchner. El que se largue contra el presidente, va a perder porque el electorado lo castigará", estimaron, confiadas, las fuentes en cuestión.

Finalmente, es pertinente indicar que pese a la convicción con que fue transmitida la versión, la designación de Bordón debe atravesar, objetivamente, por varias instancias previas: desde la interna kirchnerista misma hasta la relación con el Partido Justicialista, así como la reacción ante la sugerencia de algunos poderes internacionales —incluídos gobiernos— que siempre tienen algo para decir.