El martes practicamos un ejercicio llamado «Amanecer negro» ante la Asamblea Parlamentaria de la OTAN. En esta simulación, una red terrorista yihadista ha adquirido una “bomba sucia” y la hace explotar antes las puertas del Cuartel General de la OTAN. Más de 300 representantes de los países de la Alianza Atlántica asisten al ejercicio que representa esta impensable tragedia: cientos de miles de víctimas, severas tensiones económicas, grandes sufrimientos medioambientales y sociales.
En este escenario de catástrofe, se evidencian dos verdades fundamentales: el terrorismo catastrófico puede y debe impedirse y Europa puede y debe hacer más en ese sentido. Aunque ficticio, el escenario de «Amanecer negro» se basa en hechos del mundo real. Los grupos terroristas radicales que tratan de golpear objetivos militares en Europa y los Estados Unidos, y adquirir uranio enriquecido, existen, y, sólo en Europa, este material se encuentra en unos cincuenta laboratorios de investigación, a veces con bastante poca seguridad.
No hemos hecho lo suficiente, en ninguno de los dos lados del Atlántico, para impedir este escenario. En 1993 los Estados Unidos implementaron un sistema con el objetivo de hacer seguras las instalaciones rusas, pero no es suficiente. Igualmente, la iniciativa global de reducción de las amenazas no va muy lejos. Se hace necesario que los países del G-8 hagan las aportaciones a que se han comprometido para hacer seguro o destruir el material nuclear en Europa y el mundo. Europa debe desarrollar las organizaciones multilaterales contra el terrorismo, y los Estados Unidos y la Unión Europea deben aproximarse para luchar contra éste.

Fuente
International Herald Tribune (Francia)
El International Herald Tribune es una versión del New York Times adaptada para el público europeo. Trabaja directamente en asociación con Haaretz (Israel), Kathimerini (Grecia), Frankfurter Allgemeine Zeitung (Alemania), JoongAng Daily (Corea del Sur), Asahi Shimbun (Japón), The Daily Star (Líbano) y El País (España). Además, a través de su casa matriz, lo hace de manera indirecta con Le Monde (Francia).

«Now in rehearsal, the unthinkable», por Sam Nunn y Pierre Lellouche, International Herald Tribune, 31 de mayo de 2005.