La política militar de carácter unilateral de George W. Bush da lugar a nuevas alianzas geoestratégicas. La más significativa es la formación de un triángulo entre China, Irán y Rusia.
El acercamiento entre Moscú y Pekín es uno de los acontecimientos más importantes de los últimos 18 meses pero ha pasado prácticamente inadvertido. Esta nueva proximidad ha ido sin embargo tan lejos que China y Rusia realizaron un ejercicio militar conjunto en 2005. Las ventas de armas entre ambos países florecen y se desarrollan de manera paralela a los intercambios no militares, sobre todo energéticos. La anulación de la construcción del oleoducto que uniría las reservas petroleras de Siberia a China pudo parecer un punto de parada pero en realidad el oleoducto ruso llegará a partir de ahora, por solicitud de Japón que a cambio costeó los gastos del oleoducto, hasta el puerto de Najodka. Ese puerto está situado a 40 millas de las fronteras chinas y prolongarlo no costaría nada. En ese caso, Tokio habrá pagado la obra por ambos países. Además, China realiza importantes inversiones en las empresas petroleras rusas y ha contribuido a la renacionalización de Yukos.
China invierte asimismo de manera masiva en el gas iraní. Pekín contraviene de esta forma las restricciones comerciales impuestas a Teherán por Estados Unidos. Rusia y China ayudan también a Irán a desarrollar su programa militar. Rusia participa ampliamente en el programa nuclear iraní. Estados Unidos está convencido de que ese programa tiene como objetivo fabricar armas nucleares.
En la actualidad, Irán y China apoyan la política de Vladimir Putin con relación a Chechenia; Rusia e Irán la política de Pekín respecto de Taiwán, y Rusia y China la política nuclear de Irán. Esta alianza se establece contra Estados Unidos y su política de «democratización». Tiene como fin crear un contrapeso a las ambiciones globales estadounidenses.

Fuente
Asia Times Online ">Asia Times Online
Aparecida a finales de 1995, la edición impresa del Asia Times , diario anglófono de Hong Kong, desapareció en julio de 1997 para dar lugar en 1999 a un verdadero periódico regional en línea. Su versión en chino, Yazhou Shibao Zaixian, se encarga desde 2003 de la traducción de una parte de los artículos de la versión en inglés así como de la realización de reportajes originales sobre China.

«The ties that bind China, Russia and Iran», por Jephraim P Gundzik, Asia Times, 4 de junio de 2005.