Después de numerosos ataques palestinos en la frontera, Israel invadió el sur del Líbano, el 14 de marzo de 1978, para eliminar las bases de la OLP. Apoyándose en su aliado maronita local, el Ejército del Líbano Sur de Saad Hadad, Tsahal avanza con rapidez, empujando a 300 000 refugiados y dejando miles de muertos, sobre todo entre la población civil. Tanto Tsahal como el ALS cometen innumerables abusos y crímenes de guerra, lo que provoca, a finales de marzo, que la ONU envíe, a solicitud del Líbano, la UNIFIL, una fuerza de interposición que será hostigada de manera sistemática por el ejército israelí y el ALS. En abril de 1978, el bombardeo de un campamento de cascos azules irlandeses deja 8 muertos, mientras en 1980 el ALS secuestra y degüella a dos cascos azules. El Jerusalem Post acusará a Irlanda de antisemita y propalestina y justificará los asesinatos. En 1982, los tanques israelíes dispararán deliberadamente contra las posiciones de la UNIFIL que intentan oponerse a su avance hacia Beirut. Empantanado en el sur del Líbano, criticado a causa de los abusos de su aliado el ALS y hostigado por la resistencia del Hezbollah, Israel no se retirará del Líbano hasta mayo de 2000.