Los resultados de las elecciones en Alemania no fueron decisivos. Por esa razón, el nombre del nuevo canciller no puede conocerse antes de la esperada reunión entre los dos partidos principales, a saber, el Partido Cristiano Demócrata y el Partido Socialdemócrata. Los dos partidos interesados deben encontrar un terreno de entendimiento que permita poner fin a la crisis que vive el país.
El egoísmo político y el desacuerdo caracterizaron las primeras negociaciones entre los partidos en juego. Se perfilan dos fórmulas; la primera, que además es la más probable, se trata de una «coalición ampliada» entre los dos grandes partidos. Pero, en ese caso, ¿quién será el canciller? La segunda alternativa consiste en poner a un lado a los dos rivales, Schröder y Merkel, y seleccionar una tercera persona que logre el consenso de los dos partidos. Esta segunda alternativa debe haber sido propuesta por los hombres de negocio alemanes que son los más afectados por esta crisis política. No surgieron coaliciones anticipadas antes de la elección entre diferentes partidos con orientaciones diferentes. Así, el hecho de escoger a un canciller (sin color ni sabor) como solución agravará sin dudas la situación en Alemania. Sobre todo debido a que el país pasa por una fase de angustia que requiere una gobernabilidad excepcional.
Sin embargo, lo que es sorprendente en este escrutinio es la intervención extranjera en el conflicto entre los partidos alemanes. Turquía, por ejemplo, manifestó su apoyo al Partido Socialdemócrata y a Gerhard Schröder en persona, mientras que Estados Unidos decidió apoyar al Partido Cristiano Demócrata y a su líder Angela Merkel. En ese marco, debemos recordar que el gobierno de Ankara envió un mensaje de respaldo a los responsables del SPD. Sin olvidar, no obstante, que los ciudadanos turcos en Alemania, que representan 2,2 millones de habitantes, pueden tener una influencia directa aquí en todos los planos.

Fuente
As Safir (Líbano)

«ألمانيا: هل هناك خيار ثالث؟», por Ghassan Abou Hamed, Assafir, 21 de septiembre de 2005.