El presidente George W. Bush quiso bombardear los estudios de Al-Jazira en Doha (Qatar), revela el Daily Mirror del 22 de noviembre de 2005. Sin embargo, el primer ministro Tony Blair lo disuadió de hacerlo, habida cuenta de las consecuencias que habría tenido la agresión de un Estado aliado (en Qatar se encuentra la base militar estadounidense más importante de la región, fuera de Irak).

Eso es lo que revela la divulgación de un memo secreto, que reproduce el texto de la conversación mantenida por los dos hombres, el 16 de noviembre de 2004. El vocero del Primer Ministro británico se negó a comentar el documento, destacando que nunca reacciona a filtraciones ilegales. Se inició un procedimiento en contra de un funcionario, David Keogh, sospechoso de haber transmitido el memo secreto a la prensa mediante un abogado.

Al-Jazira es la primera cadena de televisión que cubrió conflictos en directo, destacando el punto de vista de las víctimas del Imperio anglosajón.

Los Estados Unidos ya habían procedido a bombardear la oficina de Al-Jazira en Kabul, luego la de Bagdad. Además, lograron acusar de terrorismo y condenar en España al reportero estrella Tayseer Alouni, basándose en los informes anónimos suministrados por la CIA y el Mossad.

Violentamente cuestionada esta semana por el Departamento de Estado por su participación en la conferencia Axis for Peace 2005, la cadena catarí tuvo que precisar que participaba en el evento en términos de difusión y no de financiación.