Mientras hay una gran discusión acerca de la forma en que se utilizaron los servicios secretos para apoyar los argumentos a favor de la guerra de Irak, se ha debatido mucho menos el hecho de que la CIA también quiso influir en los medios para que rechazaran la guerra. Sin embargo, Michael Scheuer, el autor anónimo deImperial Hubris, el ex diplomático Joseph C. Wilson IV y su esposa Valerie Plame o más recientemente Paul Pilar, todos han hecho uso de la palabra para denunciar la guerra de Irak en nombre de la CIA. Sus declaraciones demuestran que se trata de una organización política. Lejos de ser manipulada por los políticos, la agencia ha utilizado regularmente los medios para apoyar sus ideas políticas ante la opinión pública. Sin embargo, los políticos rechazan admitir la politización de la agencia.
En el caso de la guerra de Irak, dos comisiones investigadoras han demostrado que la CIA no fue influida por los políticos, sino que la politización partía del interior de la agencia. Ya en los años 90, ésta había organizado filtraciones para impedir un derrocamiento de Sadam Husein que no deseaba. Hoy, Pilar afirma que la agencia hizo bien en informar al público, pero en realidad lo que hizo fue en apoyo a su agenda política.
No hay que dejarse engañar cuando ocurran las próximas crisis.

Fuente
Los Angeles Times (Estados Unidos)

«It’s no secret: The CIA plays politics», por Danielle Pletka, Los Angeles Times, 21 de febrero de 2006.