Nuevos focos de protesta se prenden paulatinamente en el territorio ecuatoriano. El día 15 el mapa de la revuelta se amplió a la provincia de Bolívar, se consolidó en Cotopaxi, Chimborazo cerró varias de sus vías de comunicación, se retuvo a 15 militares en Pastaza, Asamblea de los Pueblos y la Red Amazónica de Sucumbíos se movilizaron en apoyo al levantamiento , se profundizó la protesta en Imbabura, sigue avanzando y engrosándose la marcha hacia Quito donde esta mañana los estudiantes salieron a las calles con la misma plataforma de lucha y a los que se les reprimió violentamente; se mantiene la toma de la Iglesia de la Catedral que se encuentra cercada por fuerzas policiales y comienzan ha llegar los primeros grupos de indígenas a Quito. Se avizora una nueva toma de la capital de la República. Llegan los recuerdos del pasado, y los precios de los alimentos se disparan.

Mientras tanto, el gobierno no pudo seguir sosteniendo su discurso sobre la “debilidad del levantamiento” y por el contrario, a través de distintos voceros, entre ellos el Presidente de la República, aceptaron que llegan días de profunda inestabilidad para el país a la vez que propusieron, por primera vez desde el inicio de las negociaciones sobre el TLC, un foro abierto a través de los medios de comunicación, a pesar de que los negociadores fueron obligados a firmar una clausula de confidencialidad y que se encuentra ya negociado el 90% del Tratado, de espaldas al país, según denunció Augusto Tandazo, jurista experto en el tema.

En cadena nacional, Alfredo Palacio, Presidente Constitucional, se pronunció sobre el proceso de negociación que mantiene el Estado ecuatoriano con los Estados Unidos asegurando que defenderá los intereses nacionales, el mismo argumento que sostuvo frente al contrato con la Petrolera OXY, para terminar afirmando que la reforma constitucional profunda será el único camino para garantizar la sobrevivencia del Ecuador.

Alfredo Castillo, el cuarto ministro de Gobierno del régimen en menos de un año de gestión, anunció en varios medios de comunicación su renuncia: “Ecuador está gobernado por intereses que no son precisamente populares. El Estado ecuatoriano está enajenado a un aparato financiero, especulativo, que lo conduce y lo determina a través del sistema de endeudamiento de Ecuador y a través del control del petróleo, de los recursos y la significación geopolítica que tiene Ecuador” declaró el ex-ministro a la agencia EFE.

Sin embargo las organizaciones sociales que se oponen al TLC, que exigen la caducidad del contrato con la petrolera OXY y que piden la convocatoria a una Asamblea Constituyente, mantienen en alto sus banderas y formas de lucha. Desecharon una invitación del Subsecretario de Gobierno para asistir el fin de semana a “talleres” y se analiza la invitación cursada por el Presidente de la República a la dirigencia de la CONAIE para dialogar...