Ciertamente hay un aspecto de nacionalismo y de espíritu independentista que lleva a todos a no objetar a Castro porque es el que asegura la libertad frente al gigante norteamericano y también contra las maniobras de los exiliados cubanos en Miami, expresión de los viejos dueños de la isla, como se comprende incluso sin ser castristas fanáticos. Una situación de emergencia que vista desde acá y a la luz de los que ocurre en el mundo "libre" acaba en ser ejemplar, y hace pensar en una suerte de "cubanización" del mundo.

También para muchos de nosotros la discriminación de las posiciones políticas es cada vez más similar a la del tiempo de la guerra fría: o contra EEUU y entonces con la URSS, o viceversa, lo demás viene después. Por demás está lo que predican en Italia los neoconservadores, con un realismo que los lleva a reírse de las almas "reformistas", pacifistas, que piensan aún en una tercera vía entre el imperialismo norteamericano y los pueblos oprimidos por la pobreza globalizada cuando no por la ferocidad de Bush.

En Cuba se palpa con la mano la realidad de esa "radicalización", la cual sin embargo es cada vez más palpable en el Occidente desarrollado. Quien llega a Cuba nutrido por los mitos guevaristas de nuestra juventud, pero también cuando se ha dado atención a tantas noticias sobre la represión cubana hacia los homosexuales, opositores diversos, artistas e intelectuales, no puede más que enfrentarse ante todo a este prejuicio esencial. Puede darse cuenta de que la tolerancia y también la pura y simple admiración y afecto que los cubanos alimentan hacia Castro y con el cual aceptan sacrificios y limitaciones, corresponde al estado de emergencia en el cual todos saben que se encuentran.

Es un espíritu de CLN , tantas posiciones diversas y contrapuestas entre ellas en muchos puntos, que sin embargo, suspenden sus diferencias particulares y se adaptan a una condición de lucha común. Sea esto verdadero o no, (pero que es verdadero lo demuestra la duración y severidad del embargo que EEUU aún mantienen hacia Cuba después de decenios) es con este espíritu con el cual hablan acerca de los problemas de la Isla aquellos con los que me reúno en Cuba, intelectuales y gente común. Así hablan del "período especial", aquel que siguió a la caída del muro de Berlín y duró a lo largo de los noventa, en la cual la ayuda soviética vino a menos, faltaban los productos esenciales, y se alimentaban casi solo de agua con azúcar.

Cuando los demócratas de izquierda italianos lanzan campañas contra la represión en Cuba, contra la pena de muerte, muy poco practicada, basta una condena por violar los derechos humanos, y sin embargo, dan la bienvenida al presidente de EEUU de visita en la Unión Europea, declarando sin ningún pudor que el segundo mandato de Bush será seguramente mejor que el primero, y olvidan todo el peso que ha tenido en el pasado reciente y continua teniendo el empeño norteamericano para estrangular el experimento cubano. Qué es lo que no les parece suficientemente democrático a nuestros ex compañeros de la izquierda italiana. Por ejemplo, faltan aquí los partidos políticos, las elecciones que existen, se desarrollan a partir de listas formadas que parten de asambleas locales que en un proceso gradual, que va desde votos manifiestos para una suerte de primaria a votos secretos más adelante, escogen a los candidatos.

Este procedimiento asambleario, inicialmente con votos a mano alzada, se presta obviamente a abusos y controles. Ahora, comparemos la formación de las listas "bloqueadas" que votamos en Italia. Para una elección "primaria", solamente la de Prodi en la izquierda, las listas de los candidatos al parlamento se deciden por las instancias del partido. Pero los inscritos en los partidos, en Italia, también aquellos que tienen estatutos y procedimientos democráticos, son una ínfima minoría de los ciudadanos. Me parece que lo había argumentado brillantemente Ferdinando Adornato cuando aún no había caído presa de la locura de Forza Italia. ¿ Y les parece que con este sistema un italiano de buena FE, incluso ingenuo, pueda de veras sentirse en Cuba como representante de una democracia mejor y más libre que la de Fidel ?

Si quito el prejuicio "democrático", que hace agua por todas partes, ¿como veo la situación cubana?

Veo algunas realizaciones no banales del "régimen". La ELAM, Escuela Latinoamericana de Medicina, donde tres mil estudiantes de todos los países de América Latina estudian gratis, hospedados y con estipendios, para convertirse en médicos en un campus que está situado en una de las antiguas propiedades de los ricos norteamericanos. Estos jóvenes reciben -sufren diría Bush- una educación política que los prepara a no tratar de vender su propia capacidad en el mercado estadounidense o similares, regresando en cambio a sus comunidades de origen: Bolivia, Venezuela, Salvador, Nicaragua...incluso Brasil, en lugares donde otros médicos quizás no deseen ir. No están obligados a hacer todo esto. Aquellos con lo que he hablado largamente y en privado se sienten comprometidos. Resultado del lavado de cerebro. Bah, si hubiesen lavados así en nuestros países "libres" donde el lavado viene a cargo de las televisiones berlusconianas.

Veo después el hospital oftalmológico de la Operación Milagro, miles de personas ciegas y semiciegas por la catarata que vienen de países latinoamericanos pobres y que son operados gratis y hospedados con sus acompañantes por el tiempo necesario para la operación. Según médicos expertos, la catarata es normalmente una operación de rutina, pero los oculistas latinoamericanos son violentamente contrarios a este milagro, porque obviamente reduce la clientela y pone en crisis un sistema de explotación capitalista de las capacidades.

Finalmente visito la UCI, Universidad de Ciencias Informáticas. Ocho mil estudiantes, campus esta vez sobre el terreno, reestructurado como una pequeña ciudad satélite a partir de la vieja base de espionaje soviético. Equipamiento modernísimo, ocho mil computadoras, cursos teóricos y prácticos, una producción de software que por primera vez este año ha permitido equilibrar el presupuesto de la escuela, que por consiguiente se sostiene por sí misma, produciendo programas para la informática en la medicina, en la agricultura, en la instrucción escolar y la educación artística. Todo es gratis para los estudiantes seleccionados de las escuelas de nivel medio superior, donde ya se ha introducido la educación informática a su nivel.

Por la UCI que está centralizada - pero ocho mil y más es un número relevante- existe una cantidad de iniciativas locales que llevan adelante el esfuerzo de mantener también las escuelas de provincia al mismo nivel que el de las "centrales". Visito dos ciudades. Pinar del Río, extremo oeste de la isla, cerca de 200 mil habitantes, dos casas editoras, revistas, escuela de artes para todos, un círculo bellísimo, nosotros lo llamaríamos así, el patio de Pelegrín, a partir del nombre del artista que vende sus propias obras en el mercado, incluso internacional, lo financia todo. Niños, jóvenes, ancianos pasan parte del tiempo en un gran jardín en actividades artísticas, recreativas y educativas. Igual en otra provincias, como la de Santa Clara , la sede del mausoleo del Ché, pero también con una intensa vida cultural alrededor de un teatro construido a fines del siglo XIX y con espectáculos cinco días a la semana.

¿Hay alguien que trabaje en Cuba? Además de la producción de la UCI que de cualquier manera ahora se paga los gastos, está el turismo que hasta ahora ha permitido superar muchas dificultades del "período especial". Y está obviamente el comercio con la Venezuela de Chávez, que intercambia el envío de miles de médicos y maestros cubanos que están ganando la batalla por la salud y por la alfabetización de Venezuela con el envío de petróleo y de dinero.

La revolución cubana no es más solo una cuestión de proyectos y charla socialista, se convierte en un fenómeno concretamente capaz de brindar modelos, de constituir un centro de resistencia a la fuerza del capitalismo norteamericano. Cubanización del mundo en múltiples sentidos. Ante todo en el sentido de que a partir de Cuba, de Venezuela, pero ya también de la Bolivia de Morales, del Brasil de Lula, del Chile de la señora Bachelet, de la Argentina de Kirchner, se está dando un vuelco en países que tienen intereses en hacerse autónomos de EEUU y pueden convertirse en socios de una Europa un poco menos dependiente de Bush.

Será verdad que ahora el interés del gran capital norteamericano está orientado hacia el Oriente de la India y China, esta última ya propietaria de media América. Pero quizás gracias también a esta menor atención para la mitad del continente por parte de Washington en estos países se está construyendo una alternativa no sólo política, sino también social al modelo capitalista cada vez más evidentemente en crisis. Que todo esto suceda en una región donde el rostro humano del socialismo puede tomar incluso la semblanza del Buena Vista Social Club, de la música y del placer de vivir del Caribe, no hace más que hacer la perspectiva más atrayente y amigable.