“.....No tengo DNI para entrar en el sorteo”. “Me sacaron porque me accidenté”. “El ingeniero no quiere quejas”.

Después de 5 años de gobierno nacional y 4 de gobierno municipal y regional, las mujeres en Bocanegra(*) no sentimos que la ansiada democracia, que nos hizo soñar un país diferente, alguna vez nos llegó a tocar. Somos miles de mujeres que seguimos marchando en busca de mejores condiciones de vida con justicia y equidad, algunas optamos por inventarnos maneras para sobrevivir al lado de nuestra familia. Otras, simplemente no hemos tenido otra opción sino creer en las salidas inmediatistas, asistencialistas y clientelistas que brindan los gobiernos nacionales, municipales y regionales de turno. Esa es la realidad de nosotras las mujeres de los asentamientos humanos. Como en todo el país.

Las tres organizaciones que sostienen nuestra experiencia barrial, Coordinadora Local de Comités de Vaso de Leche, Banca Comunal y Comité de Gestión, hemos tomado un tiempo para reflexionar acerca de la participación de nosotras, las mujeres, en el programa A Trabajar Urbano y éstas son nuestras reflexiones:

En su mayoría, las mujeres de nuestro barrio que participan de ATU (A Trabajar Urbano), son mujeres jóvenes, padre y madre (de hijos y muchas veces de hermanos) con ganas de vivir y participar pero no encuentran un trabajo. Al iniciarse este programa social nos alegramos de ver a nuestras compañeras disfrutando de “un trabajo, por así decirlo” por 3 meses, es “una ayuda” decíamos.

14 nuevos soles diarios, cumpliendo las 8 horas. 84 nuevos soles semanales. Pero, con S/. 84 semanal ¿se puede hacer mercado? ¿se puede pagar deudas? ¿se puede comprar los útiles permanentes que nos piden en el colegio? ¿y la luz, el agua? Acaso, ¡¿se puede ser solidario?!

Nuestras compañeras comienzan a quebrar su salud. Miremos en qué consiste su trabajo: abrir zanjas (o demoler) con comba y lampa, otras hacen mezcla (cemento con piedra chancada, que al mezclarse triplica su peso), otro grupo de mujeres vacía esta mezcla en latas, se protege con un polo del hijo, doblado en 3 sobre el hombro y lo carga hacia la obra. Mientras, irónicamente el alcalde del Callao, Kouri, ofrecía el famoso SEGURO DE A SOL. Si morímos intempestivamente se le entrega 5 mil nuevos soles a nuestros hijos (1 sol mensual hasta los 65 años de edad). O sea, debemos morir antes de los 65 para que nuestros hijos reciban los 5 amados miles de nuevos soles. Pero el alcalde Kouri (conocido por sus visitas al SIN) debe recordar que no aceptamos ese seguro porque nosotras queremos vivir y exigimos que nos permitan vivir, con un buen control de nuestra salud, con médicos de verdad, con medicamentos de verdad y NO CON LOS DE A SOL. Alrededor de 600 mujeres en el polideportivo Grau del Callao nos reímos del seguro de marras. Si alguna mujer lo está pagando, no tengo información. Tal vez después de este artículo haya una respuesta.

Un canal de televisión presentó un documental acerca de la presencia de las mujeres en el Programa ATU y el mensaje de fondo era: ¡qué fuertes son las mujeres de los AA.HH.! ¿querían igualdad?. Pero el documental no dijo que las mujeres (ni los varones) carecen de seguro contra accidentes y que si no trabajan las 8 horas ¡no ganan los 14 soles! y si faltan un día, les descuentan el día. Tampoco dijo que algunos malos dirigentes o regidores (como en nuestro caso) usan esta masa de mujeres para movilizarlas para sus intereses electorales y personales, por ejemplo las obligan a comprar polladas, bingos, participar en actos de inauguración de alguna vereda o a participar en algún desalojo, etc.

Esta oportunidad de ATU se fue convirtiendo en una amenaza para las mujeres y para la organización, ya nuestras compañeras se dormían de cansancio durante las reuniones y no aportaban con sus ideas. Comenzamos entonces a concederles tiempos para que descansen y se descontinuaron, el cansancio pesó sobre sus opciones. El sistema no deja de golpear.

Ahora, las mujeres todavía sonríen, sin embargo los esfuerzos físicos que realizan no son buen augurio para una buena vejez. Igualdad de oportunidades sí, pero respetando nuestras condiciones humanas. Cuando nuestras mujeres comiencen a hacer estragos por este doble esfuerzo, ya no estará Toledo, ni Kouri, ni Canches, ni Kucsinsky, ni Bruce, para responder. Los más duros, apelarán a la reelección. Pero, como siempre, se irán del país a disfrutar de lo acumulado y si los enjuiciamos, prescribirán los casos y volverán al país y sin sangre en la cara, pretenderán volver a gobernar, otros harán mil dramas, hasta se casarán en la cárcel, todo “por amor al Perú”.

Son los nombres de las mujeres que dejan la vida en “A Trabajar Urbano”, que deben aparecen en la historia del Perú. De lo contrario, siempre será la misma historia.

Gracias a Paula, Edi, Nancy, Corina, Gladis, Segundo, Abel, Isabel, Bonifacio, Alfonso, Timoteo, Gabo, Chabu, Bety, Luisa, Meche, María, Charo, Mariano, Ricardo, Lucho, por su tiempo y sus deseos de seguir construyendo aún contra la corriente.

* Bocanegra. AA.HH. en el Cono Norte del Callao, Población aproximada, 45,000 habitantes.

Luzmila Yalú Ayay