La US Freedom of Information Act (FOIA) cumplirá mañana 40 años, pero no será un día de celebración, pues nuestro gobierno, obsesionado con el secreto, oculta numerosos documentos e informaciones. Los acontecimientos actuales (guerra, violación de los derechos civiles, aumento del precio de la energía, cabildeo) deben tener una mayor transparencia.
El FOIA no se respeta, como tampoco los plazos para dar las informaciones. Sin embargo, cada vez más el mundo adopta este tipo de legislación y reconoce la utilidad de la libre circulación de informaciones. Setenta países han aprobado textos de este tipo que obligan a los gobiernos a hacer públicos sus documentos, lo que permite combatir la corrupción, desarrollar la acción ciudadana, pero también la confianza en la acción del gobierno y por lo tanto la aplicación de las políticas. Este sistema se desarrolla igualmente en los países pobres.
Es necesario repensar el FOIA para hacerlo más eficiente, de lo que depende nuestra democracia.

Fuente
Washington Post (Estados Unidos)

«We Need Fewer Secrets», por Jimmy Carter, Washington Post, 3 de julio de 2006.
«We need fewer secrets for our rights», Korea Herald, 5 de julio de 2006.