Lideres de Perú, Chile, Colombia y Guatemala, que participaron en el panel sobre “las oportunidades y desafíos a las nacionalidades y pueblos Indígenas”, señalaron la importancia de este Congreso:

Este Congreso es ”una oportunidad de desarrollar propuestas y soluciones desde abajo”, afirmó Carlos Batzin de la CICA Guatemala

“Tradicionalmente, anotó Humberto Cholango, presidente de la ECUARUNARI, los indígenas fueron invitados a los foros, para exponer como invitados, pero no como actores. Ahora, esta Coordinadora se ha conformado por pueblos indígenas, y los encuentros serán dirigidos por y para los propios indígenas”. Para Batís, “esta Coordinadora, dará un espacio de reflexión y análisis donde los pueblos indígenas puedan generar nuevas propuestas, alternativas y soluciones al problemas con que estamos enfrentados. Será un espacio de diálogo con agendas plurales, donde lucharemos por nuestros derechos colectivos “.

Problemas como la explotación de recursos naturales, la privatización, y los tratados de libre comercio que ignoran los derechos ancestrales fueron abordados como desafíos principales.

“El derecho a la tierra, o el derecho mayor, no están en la constitución colombiana”, afirmó Lorenzo Muelas Hurtado. “Estamos reivindicando este derecho por una ley de origen. Hay 85 pueblos en Colombia, mas del 50% están en la selva, este territorio es nuestro espacio geopolítico, la diversidad biológica, el medio ambiente, la ecología, los recursos hídricos, son demasiado importantes para nuestra sobrevivencia, y somos parte de este biodiversidad…pero nos han desconocido estas derechos”.

En Chile, Pablo Mariman Quemenado, de la Nación Mapuche explicó que los Mapuches que viven cerca de la costa tienen que pagar por utilizar los puertos, y que la privatización de espacios marítimos es muy preocupante. Los Mapuches conforman el 10% de la población del país, hay también Mapuches en Argentina, y están reconstruyendo la unidad. “Estamos también construyendo un proyecto de Autonomía Política Territorial, reclamando los territorios ancestrales, para que sean espacios futuros de auto gobierno”. Una de las necesidades claves mencionadas por Quemenado y también por Rodrigo Montoya Rojas de Perú, fue la necesidad de preparar líderes para incidir en políticas y para negociar. “Pero queremos otras formas de poder, otras relaciones” advirtió Rojas.

"Hay que evitar los trampas del poder, no caer en la trampa de asistencialismo. También tenemos que escoger nuestros aliados con cuidado. Muchas ONGs, viene neutralizando, quitando nuestras sueños, despolitizándonos con plata fácil, hay excepciones, pero uno de los trabajos de la Coordinadora seria hacer una evaluación critica. No vamos a realizar todo solos, necesitamos apoyo y aliados, pero vamos a buscar aliados con el corazón de cambio. Hay que recordar que muchos de los grandes proyectos políticos fueron construidos sin mucho dinero, con recursos propios”.

Los avances en Bolivia en Ecuador, hacia la construcción de movimientos indígenas con liderazgos fuertes con capacidad de incidir, influir y lograr cargos importantes fue reconocido como antecedentes importantes.

Rojas explicó que “en estos 20 anos los bolivianos y ecuatorianos han empezado sus movimientos étnicos y políticos, pero en este tiempo en Perú no había la posibilidad de hacer algo parecido, hubo una guerra violentísima, y como consecuencia de la confrontación entre las Fuerza Armas y Sendero Luminoso, y la MRTA, era imposible que alguien piense en una organización quechua. Hubo muchas matanzas, la comisión de la verdad documentó que el 75% de las victimas fueron Indígenas quechuas, ashininkas, de la Amazonia y cuando termino esta guerra más o menos en el 2000, es cuando esta fuerza empezó a cristalizar.

Pero no todas las personas indígenas son enterradas del proyecto de la Coordinadora. La brecha digital, las inequidades, el choque a veces entre comunidades, algunas de las cuales han sido contactas por la primera vez. Estas comunidades sufren alta discriminación, son tratados como rateros, como terroristas explicó Batzin, porque tienen otra forma de pensamiento. Están viviendo en situaciones de alta vulnerabilidad, agudizadas con la explotación petrolera, y de otros recursos naturales. Hay una necesidad urgente de formar nuevas propuestas alternativas basadas, según Batzin, “en el reconocimiento de la diversidad y los valores de los pueblos indígenas”.

“La lucha contra el neoliberalismo y la explotación son una prioridad. Vamos a movilizarnos contra los tratados de Libre Comercio, y en contra los proyectos de suicidio colectivo”, afirmo Cholango.

Temas como la autodeterminación, el derecho a la tierra, educación bilingüe, la participación política de las personas indígenas, la construcción de un poder comunitario, el reconocimiento de identidades culturales dinámicas y el desarrollo de alternativas al modelo económico actual, que tome en cuanta ejes transversales como el enfoque de genero, la biodiversidad y el medio ambiente, fueron señaladas como prioridades claves.

“Y no vamos a luchar solo por los pueblos indígenas, estamos en solidaridad con todas los personas pobres”, dijo Cholango. Estamos uniéndonos no solo por el pasado, sino también para que en el futuro nuestros jóvenes lideren con nuevos rostros, con nuevos nombres, jóvenes bilingües, trilingües, quienes tienen un manejo de esta nueva forma de poder y relaciones, y quienes se mueven con facilidad entre los mundos de la política y la comunidad.