Las acciones hostiles tienen la intención de amedrentar a los periodistas "que informan de las actividades aparentemente delictuosas que ejercen estos señores a la sombra de cargos públicos o partidistas", precisa la FELAP.

El documento destaca los ataques injuriosos contra Irene Garzón Fernández, del diario Primera Hora; Leonardo Aldridge y Oscar J. Serrano, vicepresidente primero y presidente de la Asociación de Periodistas de Puerto Rico (ASPPRO), respectivamente.

En opinión de la FELAP, las acciones son parte de una campaña dirigida a justificar agresiones físicas, como las sufridas por las reporteras Dennise Pérez (del diario El Vocero), Yaisha Vargas (The Associated Press) y Celia Hernández (WKVM Radio), así como el fotoperiodista Luis López (El Vocero).

El viernes último Vargas fue golpeada en el rostro con una botella, lanzada por hordas del opositor Partido Nuevo Progresista (PNP). La FELAP considera lastimoso que agentes del Negociado de Investigaciones Especiales (NIE) del Departamento de Justicia de Puerto Rico, en lugar de dar protección a los periodistas actuaran en aparente contubernio con los agresores.

El comunicado de la FELAP, que acoge a unos 80 mil miembros a través de sus respectivas organizaciones profesionales en América Latina y el Caribe, demanda respeto para los periodistas puertorriqueños.

Además, exige de las autoridades una mayor diligencia en la preservación de los derechos de los comunicadores sociales y condena los insultos y las agresiones ejercidas en su contra por parte de la dirección y la militancia del PNP. Señala que quienes se amparan en la libertad de expresión para obstruir el libre ejercicio del periodismo y agredir a los reporteros, lesionan los verdaderos intereses del pueblo puertorriqueño.